Una lista con las mejores sevillanas para bailar

Donde el diámetro de un adoquín y la poda de un árbol han de ser motivos de discusión, nos hemos puesto una vez de acuerdo. En Sevilla, la Semana Santa del pasado año pasó desapercibida. La de este, con la sensación áspera de tener el cielo dispuesto y todo en la calle, a excepción de lo verdaderamente importante: las cofradías y sus imágenes. Superadas ya estas fechas con enorme extrañeza, se acerca el segundo gran hito de la primavera sevillana: la Feria de Abril. Lo que sucederá, de nuevo, es un misterio. Será diferente a la del año pasado y, esperemos, a la del siguiente. Qué se comerá, qué se bailará, qué se verá en la calle, qué se beberá en las casas… Todo parece una incógnit a . Pero como nada de lo que presume esta ciudad se marcha del todo de puntillas, desde ABC hemos preparado varias listas de Spotify con música propia para estos días. Esta es la tercera.

No huele a loneta ni a algodón de azúcar. Quizá en el congelador descansan apiladas algunas botellas, pero no hay albero ni trajes que manchar. Los caballos han desaparecido. Los corros de gente, mucho antes. Y los besos de madrugada parecen tan lejanos en el tiempo que se han vestido ya de quimera. Qué queda, entonces. Pues eso que se expande por el aire, invitándonos a bailar a pares. A reír cantando y a estropear las letras, esas que tantas veces hemos escuchado . También nos invita a comentar todo lo que echamos de menos eso que sucede más allá de Los Remedios y lo bien que lo pasaremos en la siguiente; en fin, ese rosario de tópicos que en estos momentos cualquiera gusta de ofrecer. ¿De qué hablamos? ¿Cuál es la piedra filosofal que da pie a las conversaciones de los feriantes? No hay duda: las sevillanas.

La lista que ofrecemos, por tanto, no brilla con luz propia en las tinieblas solitarias de las pantallas. Está hecha, concebida, más bien, como una generadora de atmósfera. Un elemento más en la casa compuesto por sevillanas de compás y sonido perfecto para el baile. ¿A quién traemos? A grupos clásicos: de Amigos de Gines a Cantores de Híspalis , pasando por Manguara, Requiebros y Los Doñana. También Albahaca, Raya Real, Siempre Así, Requiebros y ese montón de voces que en solitario se hicieron grandes con este género popular.

De estos últimos, siempre pensando en lo bailable, escogemos algo de Parrita y del Mani , ambos tristemente fallecidos hace escasos meses. Paco Taranto, Juan Rafael Pérez-Vera , Pepe Peregil, Turronero y Manuel Orta , entre otros, se asoman con sus discos por estos renglones que suenan a guitarra y castañuela. A promesa de alivio. Solo queda alzar las manos, mantener erguido el torso y esbozar una pose que en el fondo quiere decir que volveremos.