EXPOSICIÓN
Del Imperio a los rebeldes en el Muelle de las Delicias: la cita esencial para los fans sevillanos de Star Wars
«Star Wars, Mitos de una Galaxia muy lejana» reúne objetos de culto de la saga en mil metros cuadrados de exposición
Recoger en un solo espacio todos los iconos, o al menos una parte de la saga de Star Wars , parece misión imposible, porque cada aficionado a la serie de películas tiene uno favorito, insustituible, algo que guarda en su memoria desde que George Lucas llevase la primera entrega a los cines en 1977.
Entonces, aparentemente, era una película más, hecha con una tecnología adelantada a su época, compitiendo en las carteleras con las primeras entregas de Supermán y Tiburón , pero el recorrido vital de la película por todo el mundo forzó una segunda entrega en 1980 ( El Imperio contraataca ), y el fenómeno ya era imparable, provocando un efecto paralelo: el de los fans de todo el mundo que querían tener en sus manos un icono físico de lo que veían en la pantalla.
Con ese espíritu nació en Arabia Saudí ' Star Wars Mitos de una Galaxia muy lejana ', la mayor exposición que se puede ver de objetos relacionados con la serie, algunos reales sacados directamente de los estudios de rodaje, y otras réplicas creadas con mimo, una muestra que en estos días se puede ver en el espacio Mude Market del Muelle de las Delicias de Sevilla, que provoca una peregrinación de fans cada día entre las seis de la tarde y la una de la madrugada. La muestra se mantendrá hasta el próximo 15 de julio .
La bienvenida la da una réplica a tamaño real de la Speeder Bike , esa moto deslizadora recurrente en la saga sobre la que los visitantes pueden montar y tomarse fotos sintiéndose volar a lomos de su tecnología gravitacional encauzado en una misión de patrullaje o reconocimiento por los parajes de la luna boscosa de Endor .
En ' Star Wars Mitos de una Galaxia muy lejana ', la mayoría del material expuesto está limitado a muy pocas unidades, lo que hace que sea una oportunidad única para ver juntas estas maravillas. Entre las piezas exhibidas destacan una vitrina con cabezas a tamaño real de algunos de los robots que aparecen en las películas y un espectacular diorama de la escena del «Escape de la Estrella de la muerte». Hay estatuas y figuras a tamaño real de un Sandtrooper, un Stormtrooper, el caza-recompensas más temido de la galaxia; Boba Fett, un Jawa, Han Solo en carbonita y el androide R2-D2 .
Pero más que una exposición, entrar en la muestra es dar pasos atrás en la memoria, recordando como cada objeto representa un recuerdo de cuando ese icono fue visto en una pantalla de un cine que, entonces, si era estéreo ya era un avance, o en casa gracias a las añoradas cintas VHS , que los seguidores de la saga se niegan a borrar, «aunque no tengamos ya vídeo, pero hace años que las tengo, aunque ya las películas las he ido comprando en DVD y Blue Ray ».
Ideal para visitar con niños
Lo explica Andrés , un vecino de Tomares que entra en la exposición con dos niños que no deben tener más de 8 o 10 años, a los que rápidamente dirige a una sección de la muestra, y les señala un objeto muy concreto: «ahí lo tenéis, ¿recordáis cuando os dije que Darth Vader necesitaba el casco para respirar? Pues mirad qué chulo es el casco».
Y es que Star Wars ha conseguido, entre otras cosas, que los fans acojan con empatía a algunos de los malos de la película, por lo que ver en vivo el casco del malo por antonomasia de la saga es, más que nada, entrañable, sobre todo -y esto es «spoiler»- si recuerdan que no era tan malo en La Amenaza Fantasma (1999), y que, al fin y al cabo, es el padre de Luke y Leia , plasmado para la eternidad en España con la inolvidable voz de Constantino Romero en el inolvidable «Luke, yo soy tu padre».
Volviendo al casco, los visitantes se fijan rápidamente en que lleva la firma de Hayden Christensen , el actor que interpretaba a Anakin Skywalker , pero la vista se vuelve a un diorama que recrea el escape de la Estrella de la Muerte en la primera entrega de la saga (bueno, la cuarta en realidad, porque el orden de las películas de Star Wars no altera el producto), pero no hay tiempo para recrearse, porque hay que ver parte de los decorados de Star Wars Episodio II, El Ataque de los Clones .
Y como en esta serie los malos malísimos son parte de la vida cinéfila de sus admiradores, no faltan las muchas fotografías que se hacen los visitantes con las réplicas a tamaño real de personajes como Kylo Ren , conocido como Ben Solo , hijo de Han Solo y Leia y nieto de Anakin Skywalker, o Greedo , cazarrecompensas del planeta Tatooine del que cualquier fan de la serie sabe que murió de un solo disparo de Han Solo .
Y así, 1.000 metros cuadrados de deleite estelar para conmemorar el 40 aniversario del nacimiento de la saga, que hasta el 16 de julio se puede ver en el muelle sevillano, 40 años que parecen que serán muchos más, visto que muchos de los visitantes conocen a la perfección cada letra de los guiones de la serie, a pesar de que algunos llevan el chupete colgado y casi sus padres no había nacido cuando la saga vio la luz por primera vez.