Flamenco SinCejilla
«Amor», de Israel Fernández: un «ay» de hoy
Crítica del nuevo álbum del cantaor flamenco, con Diego del Morao a la guitarra, y análisis de su exitosa visita al programa La Resistencia, de Cero
Israel Fernández está de merecida moda. Pero su nuevo trabajo, «Amor», tan solo se diferencia de los anteriores en un aspecto: la comunicación. Mantiene la calidad de, por ejemplo, «Universo Pastora», sin embargo, se ha dado a conocer al público de mucha mejor forma: dosificando los singles en el tiempo, grabando dos videoclips de un fuerte impacto visual y presentándose por una multitud de medios . Los vericuetos que por aquí recorre con la complicidad de Diego del Morao llegarán por tanto a mucha más gente. Bendito postureo del puro y el filtro sepia que no muestra impostura, sino deseo de construir una imagen poderosa. La de dos que saben lo que hacen y han de transmitirlo.
A la contra de lo que se instauró durante el mairenismo, los cortes no duran más de tres minutos, haciéndo de él un disco ligero. No me atrevería a hablar de un álbum conceptual, pero sí que encierra una atmósfera que se anuncia en el título e impregna todo lo demás, aportando uniformidad. Su eco menudo y expresivo, colorido, con mil matices, laíno y punzante, se pasea con gusto por un amplio repertorio: la malagueña del Mellizo , los aires del Cojo de Málaga en la murciana , la granaína con los tercios muy ligados, seguirillas, bulerías, tangos y fandangos.
En la soleá becqueriana , se prende flexible en varios estilos, como el de Paquirri, tan doliente. Las alegrías , con las que arranca, me transportan directamente a la «Bahía de Cádiz» de Camarón. Y eso es lo poco a reprochar: la similitud con su ídolo, a quien tiene tan interiorizado que busca de una manera natural. Su «ay», por lo demás, clama mayorías y estamos siendo testigos de su ascenso.
El éxito del cantaor en La Resistencia
Llegó la semana pasada tímido bajo su melena al espacio que David Broncano presenta en Cero. Lo hizo para charlar sobre su nuevo disco, «Amor», con una camiseta de Camarón de regalo y el álbum «Zyryab», de Paco de Lucía, en vinilo. Golpeando los nudillos sobre la mesa, emocionó a una audiencia que por ahora no ha dejado de comentar su intervención. En Instagram, el vídeo ha superado las 1.600.000 reproducciones , convirtiéndose así en uno de los más populares de La Resistencia en esta plataforma. En Youtube, se acerca al millón.
El cuplé por bulerías que tan bien cantó se llama «La maja aristocrática» y, como tal, tiene casi un siglo de historia. Fue la Niña de los Peines la que lo colgó así de perfecto en un círculo acompasado de pizarra junto a la guitarra de Niño Ricarno. Ha llovido desde aquel chaparrón del 36, pero el toledano recuperó la pieza prácticamente con el mismo traje. Preciosa, con giros en la voz y los volantes de una letra diluida en el ritmo. Es el primer artista flamenco, creo, que visita el programa, y ya ha puesto a muchos a escuchar a los viejos.