María Jiménez: «Una estrella debe olvidarse de lo que ha conseguido»
La cantante publica un nuevo disco, «La vida a mi manera», catorce años después de su anterior trabajo discográfico
Catorce años después de publicar su último disco («Bienaventurados», 2006), y apenas unos meses después de «resucitar» del coma que nos tuvo a todos en vilo, la diva sevillana vuelve a la acción con una impresionante grabación llamada «La vida a mi manera». Sin ornamentos ni experimentos posmodernos, con su voz fiera y arenosa como única protagonista, María Jiménez brilla como la estrella que siempre fue, arropada por un manto de arreglos de primera categoría y colaboradores de postín como Raimundo Amador, Miguel Poveda o Pitingo.
-Le ha quedado un disco formidable, ¿cómo se quedó cuando escuchó el resultado?
-¡Con los pies colgando! Me alegro de que también le haya gustado. Más o menos ya sabía que iba a quedar así de bien, porque lo grabé yo (risas). La verdad es que me ha sorprendido a mí, y a todos.
-Una vez dijo que si tiene una virtud, es que hace todo con la ilusión de la primera vez. Ese puede ser su secreto para volver con esta fuerza después de tanto tiempo.
-Eso es verdad. Una artista de éxito, una estrella se tiene que olvidar de lo mucho que ha conseguido, es la única manera de seguir haciendo cosas como si fuera la primera vez.
-¿Se lo pasó bien durante toda la grabación? ¿O en algún momento se puso cuesta arriba?
-¡Qué va! Nada de cuesta arriba, en ningún momento. Salió todo muy bien.
-Al final de la canción «La Soledad», se le oye decir: «¡Hasta el coño me tenéis, sacadme de aquí que ya estoy asfixiá!»
-Eso se oye, sí. Yo pedí que lo quitaran, pero todo el mundo decía: «pero si eres tú, cómo lo vamos a quitar». Estaba agobiada de calor. Era invierno, pero en el estudio hacía calor porque no se podía poner el aire acondicionado. Después se refresca un rato, pero enfriándote, sofocándote… pues claro, acabé harta.
-Tuvo que interrumpir la grabación por la pandemia, ¿verdad?
-Si, tuvimos que parar, y luego retomarla cuando ya se podía juntar una con la gente. Acabamos en mayo.
-Hace poco dijo: «Siempre he sido paciente para esperar el momento de volver. Si lo hubiera hecho antes, habría hecho el ridículo». ¿Por qué cree eso?
-Porque no era el momento. No por ninguna razón en particular, simplemente lo sentía así.
-Lo de grabar un disco, ¿ha cambiado mucho por la tecnología? ¿O sigue siendo lo mismo de siempre, en esencia?
-No, no… Yo la tecnología la uso más bien poco. La uso para las mezclas, como mucho.
-La canción «La vida», es de las cosas más bonitas que ha hecho en su carrera, ¿no cree?
-Sí lo creo, hijo. Me siento llena de felicidad cuando la canto.
-«A mi manera» también ha quedado estupenda.
-Hay muchas versiones ya, pero me ha quedado muy bonita porque me la he llevado a mi terreno. Yo llevo las cosas a mi terreno como nadie. Intento no parecerme a nadie.
-«Cuánto te debo» es también preciosa. ¿A quién le debe más en el mundo de la música?
-Pues mira, a alguien a quien no conozco, Vicente Fernández. Soy admirador de él de toda la vida. Le descubrí siendo muy jovencita, porque me compré uno de sus discos. Tenía dieciséis años, y desde entonces, tengo amor eterno por ese señor.
-¿Qué tal la experiencia de cantar con Miguel Poveda, en «Qué felicidad la mía»?
-Es una canción mía de hace cuarenta años, y ha sido muy bonito recuperarla con Miguel. Me lo pasé muy bien con él.
-Justo al final de esa canción, se le oye decir otra cuando acaba la música: «Aquí hay cosas muy buenas, esto vale un dinero·. Pero ahora con internet, los discos dan muy poco de eso.
-Y antes tampoco, hasta menos. Siempre han dado poco dinero.
-¿Qué le ha hecho más feliz en esta vida, y qué le ha hecho más infeliz?
-Ya no me acuerdo de ninguna de las dos cosas.
-El coronavirus le canceló su actuación en el Teatro Real el pasado verano. ¿Qué más le ha quitado?
-Eso me fastidió mucho, imagínate. Pero a mí, el coronavirus no me ha quitado nada más. Estuve cantando en el festival Starlite y lo disfruté muchísimo.
-¿Se imaginaba que volveríamos a estar tan mal con esto de la pandemia?
-Pues yo no, la verdad. Esto es por culpa de la gente irresponsable.
-¿Tiene ganas de cantar este disco en directo? Porque parece que va a haber que esperar bastante.
-Ya veremos hijo, ya veremos...