Jane Birkin: «Tras las denuncias por acoso, las cosas jamás van a volver a ser igual»
La cantante y actriz actúa hoy sábado en el Primavera Sound, donde ayer lo hizo su hija, Charlotte Gainsbourg
En ocasiones el Primavera Sound puede ser un ecosistema propicio para rostros famosos, al estilo, salvando distancias, de La Croisette de Cannes, cita para «starlettes» y estrellas, e incluso para reuniones familiares como la coincidencia en cartel de Jane Birkin y su hija Charlotte Gainsbourg .
Se presentan ante la prensa, informa Efe, poco «glamurosas», con ropa de trabajo, pero encantadas de coincidir en este festival -Charlotte actuó ayer, Birkin hoy sábado- y exhibiendo la complicidad (no sólo de sangre) que une a estas dos mujeres que han alternado sus carreras tras los micrófonos y el cine, y cuyos nombres, sin caer en etiquetas de herencia heteropatriarcal, están vinculados al entrañable provocador Serge Gainsbourg .
La veterana Birkin tiene a sus 71 años un hueco en la historia de la música por aquel procaz « Je t'aime... Moi non plus », susurrante pieza creada por Gainsbourg, su pareja del momento y al que la cantante ha dedicado un disco homenaje con el que se presenta aquí « Birkin/Gainsbourg: Le Symphonique » (acompañada por la Orquestra Simfònica del Vallès), con 21 de aquellas composiciones «clásicas».
Brigitte Bardot
«Yo canté “Je t'aime... Moi non plus” porque no quería que nadie la cantara», afirma esta veterana artista que. en 1968, era la pareja sentimental de Gainsgbourg, y que temía que alguna otra chica guapa -una indecisa Brigitte Bardot era la otra candidata- se metiera en una pequeña cabina de estudio para grabarla con su pareja.
El «Je t'aime...», vetado por la BBC y calificado de diabólico por la Iglesia, es considerado uno de las composiciones más sexys de la historia según una encuesta publicada por « The Guardian », apunta la artista británica, afincada desde hace años en tierras galas.
De hecho, a Birkin, a la que en su momento sorprendió aquel éxito , le parece «divertido» que en pleno 2018 a algunas personas se sientan todavía azoradas con los suspiros y jadeos de la canción .
Junto a ella, Charlote, mucho más parca en palabras, adelanta que está esperando poder disfrutar del concierto de su madre de mañana, y aunque de momento no se han planteado actuar juntas, no lo descarta en un futuro. «He trabajado con toda mi familia, y ocurren cosas especiales», dice la intérprete de « Nymphomaniac ».
Gainsgbourg, que en los últimos años se ha prodigado más en las pantallas que en los estudios de grabación, publicó a finales de 2017 «Rest», álbum que fue la base de su actuación de ayer en Barcelona, y un trabajo en el que abre a tajo su corazón , con canciones repletas de ese dolor provocado por la pérdida de los seres queridos.
Acoso a las mujeres
Inevitablemente, cuando dos artistas femeninas están juntas, y más con el morbo añadido al tratarse de madre-hija , la pregunta sobre el fenómeno en los países occidentales de las denuncias del acoso a las mujeres resulta inevitable.
De hecho, fue la primera cuestión en la rueda de prensa, lo que pareció molestar a Charlotte . ¿De verdad vamos a empezar por ahí?, se ha medio encarado con el periodista que la ha formulado.
«Creo que es algo bueno que las cosas estén cambiando pero desde mi perspectiva, he vivido en Nueva York durante muchos años y sólo puedo verlo con mi punto de vista francés, que me hace verlo demasiado exagerado », ha dicho la cantante muy circunspecta.
Gainsbourg se ha mostrado poco partidaria de los juicios paralelos desde los medios de comunicación y las redes sociales. «Todavía creo en los juicios, juzgar si alguien es culpable o no. Pero haber liberado el discurso de la mujer es algo maravilloso y necesario», ha puntualizado.
Por su parte, para Birkin «las cosas jamás van a volver a ser igual» después de todas estas denuncias que han trascendido a la luz pública impulsadas entre otros por el movimiento «metoo». «Es como una revolución sobre la posición de la mujer gracias a un puñado de personas valientes» , ha dicho la cantante que, no obstante, ha señalado que en Inglaterra se produjeron falsas denuncias que casi acabaron con la carrera profesional de los que fueron acusados de forma injusta . «Supongo que en cualquier revolución hay daños colaterales . Y estoy segura de que los hombres tendrán más cuidado», ha argumentado Birkin.