Música
The Head & The Heart: «Corren malos tiempos para América, la música tiene mucho trabajo por delante»
La banda de Seattle ofrecerá sendos conciertos el 4 de de febrero en Barcelona (Razzmatazz) y el 5 en Madrid (Joy Eslava)
Tras agotar todas las entradas -en apenas 10 días- y dejar con muy buen sabor de boca a los afortunados asistentes a su primer concierto en Madrid el pasado mes de septiembre, la banda indie-folk The Head And The Heart vuelve para dar dos conciertos en la capital y en Barcelona, pero esta vez en salas más grandes. Con esta nueva gira «Signs Of Light Tour», la banda presentará en todo el mundo en directo su aclamado tercer álbum, que fue publicado el pasado mes de septiembre entrando directamente al número 2 de ventas en Estados Unidos (Billboard), alcanzando así su mejor posición en listas -y también en cifra de ventas- hasta la fecha. Este nuevo trabajo ha sido ampliamente respaldado por la crítica más exquisita gracias a canciones tan luminosas como «All We Ever Knew» -tema que se ha mantenido durante 8 semanas consecutivas en el número 1 de la lista Adult Alternative Songs de Billboard-, o la favorita de los fans, «City Of Angels».
El grupo fue creado en Seattle en 2009 por Jonathan Russell y Josiah Johnson como vocalistas y guitarras principales en la formación. A ellos se unieron Charity Rose (violín, banjo y voz), Chris Zasche (bajo), Kenny Hensley (piano) y Tyler Williams (percusión). La banda goza de una exquisita reputación entre la crítica gracias a sus dos anteriores trabajos, el homónimo aclamado debut (auto-editado en 2011) que comenzaron a vender en sus conciertos y en tiendas de discos locales, y «Let's Be Still», que fue publicado en 2013 por el sello independiente Subpop. Para este nuevo álbum grabado en Nashville, The Head And The Heart ha ido un paso más allá, puliendo su sonido folkie otorgándole más luminosidad y universalidad bajo la producción de Jay Joyce (Eric Church, Cage The Elephant).
Hicieron «sold out» en su primera visita a Madrid, y su disco acababa de salir hacía sólo unos días. ¿El público ya se sabía las letras?
(Jonathan Russell) ¡Sí! Fue increíble y extraño a la vez, llegar a un país que nunca has visitado, con tu disco recién salido del horno, y que los fans conozcan tan bien las canciones. Cantaron con nosotros todas las canciones, las nuevas y las viejas. Fue una sensación increíble.
Las crónicas dijeron que fue muy divertido. ¿Es ese vuestro sello de identidad, la diversión por encima de todo?
Sí, nosotros tratamos de trabajar duro para ser una buena banda de directo, y creo que eso también lo transmitimos en los discos. Pero cuando subimos al escenario esa seriedad tiene que convertirse en una alegría contagiosa, queremos que los conciertos sean divertidos. Además, nosotros aprendimos a tocar nuestros instrumentos dando conciertos.
¿No sabían tocar antes de formar el grupo?
No, apenas, ¡jaja! Empezamos a practicar unos seis meses antes de formar la banda, y luego aprendimos sobre los escenarios.
Sus discos son toda una celebración, se les ve radiantes. ¿Están viviendo un buen momento personal?
Pues diría que sí, porque el hecho de estar viajando, conociendo países, disfrutando de la oportunidad de desarrollar una carrera internacional, de ver a gente de otras culturas conectando con nuestra música, era el mayor de nuestros sueños. Poder cumplirlo está siendo algo realmente increíble.
¿Viven todos en Seattle?
Estamos un poco desperdigados en realidad. Dos viven en Seattle, otro en Los Angeles, otro en Nashville y otros dos en Virginia.
¿Y cómo ensayan?
Lo que hacemos es que quedamos todos en Nashville una semana antes de salir de gira, y nos encerramos en el local que tenemos allí para ensayar todos los temas del repertorio que vayamos a llevar. Con eso nos funciona. Además, al estar separados un tiempo, cuando nos reencontramos tenemos un montón de cosas que contarnos y nuevas músicas que compartir. Eso da a la banda un enfoque más rico en perspectivas.
¿Tienen gustos musicales muy distintos?
Pues sí, bastante diferentes en realidad. A Kenny le encantan Paul McCartney, The Beatles, es muy clásico. A mí me gusta mucho más la música moderna y contemporánea, como Tame Impala. Tenemos gustos diferentes y personalidades diferentes, y como te decía, eso es lo que creo que nos hace tan refrescantes.
Muchos dicen que su banda será uno de los fenómenos de 2017, ¿les da miedo la fama?
Pues en cierta manera sí, sobre todo por cómo pueda afectar eso a nuestra relación con los fans. Para nosotros es muy importante ser cercanos y honestos con ellos, no tener, por ejemplo, a un equipo manejando nuestras redes sociales y haciéndose pasar por nosotros. Nos gusta mucho bajar del escenario después de los conciertos y pasar un rato con nuestros seguidores, es como algo natural para nosotros. Si tenemos éxito será gracias a nuestros fans, así que mantendremos esa relación cueste lo que cueste, porque es lo que nos puede hacer grandes.
Llevan poco en esto, pero ya viajan muchísimo y tienen una agenda apretada. ¿Les es fácil estar en buena disposición cada noche?
Sí, es cierto que cuando haces una cosa todos los días, una y otra, y otra vez, se puede convertir en una rutina. Pero lo que hay que hacer es encontrar la forma de hacer especial cada actuación, no sólo para el público, sino para ti también. Puede ser algo tan nimio como hacer algo distinto con tu instrumento en una canción o en otra, pero eso te ayuda salir de la rutina. También tenemos un ritual que ayuda: tomarnos un chupito de tequila antes de salir.
Cuando debutaron, telonearon a muchas bandas famosas: Vampire Weekend, Death Cab for Cutie, My Morning Jacket... ¿con quién lo pasaron mejor?
Tengo que decir My Morning Jacket, ellos tienen un espíritu de banda muy parecido al nuestro, muy luminoso y empático. Aprendimos muchísimo viéndoles actuar, no solo por lo buenos músicos que son, sino por lo bien que saben construir sus repertorios.
¿Se sienten cómodos con la etiqueta indie-folk?
¡Jajaja! Pues no sé... Yo creo que somos una banda de pop, una banda de rock. Hacemos música para que la gente lo pase bien. Especialmente con el nuevo disco, hemos tratado de hacer algo muy pop, y espero que gracias a él podamos mandar a la mierda la etiqueta indie-folk, ¡jajaja!
¿Cómo están viviendo la era Trump?
Mal. Lo más extraño es que ni yo ni nadie de mi entorno conocemos a un sólo votante de Trump. ¿Cómo ha podido ganar? ¿Qué demonios ha pasado? Corren malos tiempos para América. Tiempos oscuros. Creo que el arte y la música tienen mucho trabajo por delante para unir de nuevo a la gente.