Ariel Rot y Kiko Veneno: «Queremos celebrar la vida»
El dúo lleva el exitoso formato televisivo de 'Un país para escucharlo' al directo, realizando un show diferente en cada ciudad en su nueva gira
Llegan juntos y bromeando, entre ellos se nota la química. Rot, guitarra en mano, es más extrovertido; Veneno, manos en los bolsillos, se para antes de responder. Entre los dos lo han hecho todo: componer, producir, llenar estadios, difundir la cultura, exprimir los vicios… Entran por la puerta y ya están hablando de música, de guitarras y armonías vocales en una canción que tienen entre manos. Se han unido para una gira conjunta que les llevará por todo el país durante este año, en una recreación del programa ' Un país para escucharlo ', que presentó el propio Rot durante tres temporadas. Su idea es Clara: celebrar la vida y recuperar la música. En cada concierto contarán con artistas emergentes de cada ciudad, lo que le da un cierto aroma solidario a la aventura. Tras un inicio exitoso en Logroño, estarán el Viernes 4 de Febrero en el Circo Price, dentro del festival Inverfest.
— Kiko Veneno y Ariel Rot, sobre el papel parece una colaboración algo inusual. ¿Qué se aportan?
AR: Kiko siempre tiene algo que te saca de tu zona de confort. Cuando empiezas a componer, siempre te basas en tu fórmula, en esa manera de crear que has ido puliendo con los años. Él (Veneno), encuentra siempre un giro, una frase, un acorde diferente que me obliga a pensar de otra forma y, al final, la magia creativa sucede cuando uno escapa de su 'plantilla', por decirlo de algún modo.
KV: Para mí lo más valioso de Ariel es su meticulosidad y su orden a la hora de plantear las canciones. Es muy riguroso cuando estamos en el estudio, algo que a mí me falta porque soy más espontáneo, y lo agradezco mucho porque me ayuda a fijar las cosas.
AR: No sé si es un gran elogio eso de que soy muy riguroso… (Risas).
KV: Claro que sí, es algo que echas de menos cuando no lo tienes, para ti es natural ya.
— ¿No produce vértigo que le cambien a uno su forma de hacer las cosas a estas alturas?
AR: No, al contrario, es un estímulo. Nosotros hemos pasado por casi todos los formatos: bandas, colaboraciones, formatos reducidos… Es fantástico que sigan pasando cosas que te estimulen a hacer algo nuevo, produce excitación.
— ¿Por qué una idea tan cercana? No es algo común que artistas de su calado se bajen al 'barro' y cuenten con artistas emergentes en sus proyectos.
KV: Era la idea del programa de televisión de Ariel: una vía para introducir nuevo talento en la escena. La intención tampoco es descubrir gente nueva o poco conocida para el público si no colaborar con gente que nos aporte algo también.
AR: La idea es que los invitados formen parte del espectáculo, no que tengan el foco durante dos canciones y luego se marchen. Queremos que hagan suyo el escenario. A veces cantarán o cogerán la guitarra para acompañarnos… lo importante es que fluya.
— Dicen que quieren romper el esquema típico de un 'concierto con invitados'. Es cierto que, si hay constantes cambios de personal en el escenario, se puede romper el ritmo del espectáculo. ¿Cómo piensan enfrentarse a eso?
KV: Aquí volvemos un poco a lo que decíamos al principio. Yo soy más propenso a romper, a que el concierto de hoy sea distinto del de ayer. Pero sí hay que tener claro que el concierto es el concierto y todo tiene que encajar de forma natural y fluida, no pueden haber esos parones que hay a veces en este tipo de formatos. De todas formas, el de Inverfest será nuestra segunda fecha así que estamos probando todavía cual es la mejor forma de presentarlo. Seguro que hay cosas que van mejorando según avance la gira.
— Creo que estamos en un momento en el que la música se hace un poco por 'plantillas'. ¿Cree que es posible, en ese ecosistema, que se pueda repetir un disco tan creativo como 'La leyenda del tiempo'?
KV: No lo sé, sin duda el momento es distinto. Cuando salió aquel disco había más cosas por hacer, digamos que era un mundo más inexplorado. El año pasado se produjo lo de C. Tangana ('El Madrileño'), que yo creo que fue un cambio de rumbo importante en cuanto a que un tipo de música más moderna y urbana se funde con el folclore, que es muy rico en España. Yo no diría, por muchas cosas, que es un trabajo comparable a 'La leyenda del tiempo', pero la dirección creativa es similar.
— ¿Les gustan los géneros modernos?
- AR: A mí me interesa mucho lo que se está haciendo ahora, sí. Sobre todo fuera de las grandes ciudades, tengo la sensación de que las nuevas generaciones son muy inquietas y se están haciendo fusiones realmente interesantes.
— Y la última… ¿cómo le vendo a nuestros lectores esta unión inesperada?
- AR: Queremos celebrar la vida, la música y la amistad; de eso van nuestros conciertos.