Angus & Julia Stone: «Estar de gira es una vida salvaje y maravillosa sobre la que escribir»

El dúo australiano pasa esta semana por los festivales Jardins de Pedrables (hoy martes) y Noches del Botánico (miércoles) para presentar su último disco, «Snow»

Nacho Serrano

son dos hermanos australianos que, siguiendo la estela del dúo folk que formaron sus padres, fundaron su propia banda en 2006 en Sidney adoptando un elegante estilo folk y acústico que ha recibido constantes halagos de la crítica. Han publicado cuatro álbumes hasta la fecha: «A Book Like This», «Down the Way», «Angus & Julia Stone» y el autoproducido «Snow», publicado en septiembre del año pasado, con el que llegan esta semana a los festivales Jardins de Pedrables y Noches del Botánico .

Después de un último disco en el que contaron con el productor Rick Rubin, ¿tenían claro que este disco tenía que ser producido por ustedes mismos?

(Julia) Así es, en ningún momento valoramos la opción de trabajar con un productor en este disco. Empezamos a componer la música del álbum en la sala de estar de la casa de mi hermano, él, unos amigos y yo. Siempre hemos estado muy involucrados en todos los procesos de nuestros discos, y queríamos poner eso en valor. Estuvimos componiendo en casa, dejando que se mantuviera la frescura e intentando generar una atmósfera de atemporalidad. No necesitamos más. Cualquier espacio de la casa donde pudiéramos trabajar, nos parecía bien. Para este tipo de grabación, es mejor dejar que sólo seamos dos, Angus y yo, los que llevemos la batuta. Pero sin duda volveremos a trabajar con Rick Rubin algún día, es un tipo genial y un gran amigo. Siempre es divertido grabar con él, pero esta vez queríamos estar en Australia, en nuestro hogar, en un estudio casero que pudiéramos usar cuando quisiéramos.

¿Cómo es el entorno que rodea a la casa de Angus?

La atmósfera es muy tranquila. Las puestas de sol son de oro, atraviesan los campos hasta que se cuelan por las ventanas del estudio. La luz dorada llena toda la casa y el estudio está completamente rodeado de naturaleza. Bosques húmedos por un lado, y campo abierto por el otro. Puedes ver a lo lejos las montañas, las vacas, los canguros, los caballos corriendo y saltando. Allí te sientes como si estuvieras en tu mundo. Creo que cuando te rodeas de naturaleza, eso termina afectando al sonido. Nosotros crecimos con padres y abuelos marineros, pasando mucho tiempo en el océano, y cuando tocábamos tierra siempre buscábamos parajes naturales. Así que ese sentimiento de sentirte en tu lugar cuando estás en la naturaleza nos viene de familia, es parte de lo que somos. Es difícil cuantificar cuánto de eso se traduce en nuestra música, pero sin duda está muy presente en todo el proceso.

Aunque son pareja artística desde hace más de diez años, esta ha sido la primera vez que componen mano a mano usted y su hermano, y no por separado. ¿Eso hace este disco más especial?

Sí. Creo que «Snow» es especial por esa razón. En términos creativos nos ha permitido llegar a donde queríamos, a un lugar donde pudiéramos hacer una pequeña obra de arte juntos, de la que sentirnos orgullosos. Si fuera el último disco que vayamos a hacer, estaríamos contentos de que fuera precisamente este. Nunca soñamos con poder seguir dedicándonos a esto once años después, es increíble. Especialmente para nuestra familia.

¿Por qué titular «Nieve» a un disco hecho en Australia? ¿Fue una elección casual por la canción homónima, o la palabra encapsula el sentimiento del disco de alguna manera?

Es un poco las dos cosas que has dicho. «Snow» fue la primera canción que escribimos para el disco, y sí, el sonido de ese tema encapsula el sentimiento del disco. Después de escribirla, los dos vimos claro cuál era el sonido que queríamos. Tiene ese sentimiento de unión, de comunión, y además, la naturaleza de la nieve encierra algo muy bonito y poético en sí misma. Su expansividad, su tacto, su vista... Angus y yo pasamos dos semanas de vacaciones en Zermatt (Suiza) después de un festival acústico, y allí fue donde tuvimos las primeras conversaciones sobre hacer este disco juntos. Así que sí, hay mucha magia en la nieve para nosotros.

¿Cómo crecieron musicalmente Angus y usted, hasta converger en este dúo artístico? ¿Tenían gustos muy diferentes cuando tenían 14, 15 años?

¡Sí! Eramos adolescentes muy diferentes. A mí me encantaba bailar, así que escuchaba música de baile, todo lo que me hiciera mover el esqueleto me gustaba. También sentía una fuerte fascinación con Leonard Cohen. No lo entendía del todo, pero al escucharlo siempre me preguntaba por qué me hacía sentir tan especial, con esa profunda melancolía tan singular. Angus era muy variado en sus gustos. Le encantaba Sublime, Rage against the machine, Neil Young…. Siempre me hacía unas recopilaciones en cinta chulísimas.

Parece que el entorno es importante para su creatividad. ¿Cómo les afecta en ese sentido estar de gira por todo el mundo?

Afecta mucho. Conocemos gente increíble, descubrimos sitios alucinantes, bailamos con extraños en los bares de madrugada, dormimos en autobuses que nos llevan hasta el siguiente concierto... Vivimos como una pequeña comunidad, con nuestra banda y nuestro equipo. No es un equipo de gira, es una familia de gira a la que amamos profundamente. En las giras experimentamos soledad, excitación, felicidad, tristeza... es un patio de recreo formidable para la inspiración. Los conciertos son la mejor parte del día, claro. En realidad, estemos donde estemos, siempre estamos esperando ansiosos el momento de saltar al escenario. Estar de gira es una vida salvaje y maravillosa sobre la que escribir.

Entre 2010 y 2013 emprendieron carreras solistas, porque usted dijo que no se sentía del todo cómoda con el proyecto. ¿Qué pasó?

Fue algo que tuvo que ver sólo conmigo, con nadie más. Era una sensación que crecía en mi interior, no sabía quién era ni qué quería realmente... pero a medida que he ido creciendo, esas preguntas se han convertido en algo irrelevante para mí. La respuesta a ¿quién soy?, simplemente es quien soy ahora mismo, mientras hablo contigo, estando aquí y disfrutando de este viaje. Pensar de ese modo libera mucha presión. Antes siempre pensaba que necesitaba saber en todo momento qué ocurría conmigo y con lo que pasaba a mi alrededor, si yo estaba contribuyendo a algo o no, si aportaba algo a la gente y a mí misma... Ahora simplemente me dejo llevar y recibo las cosas tal y como vienen, día a día, disfrutando lo que me puede dar cada nuevo día.

Sus padres también formaron un dúo folk, ¿cómo influye eso en su hermano y usted?

Mamá y papá han sido una influencia gigantesca en nuestras vidas. La forma en la que viven, su espíritu de aventura, el entusiasmo por relacionarse con el mundo, comiéndose el mundo a bocados... Siempre tienen tiempo para los demás. Les encanta conocer gente nueva, compartir sus historias y escuchar otras nuevas. Los dos aman la música y tocar con otras personas. La alegría de compartir la música es algo que nos han inoculado y que también forma parte de nosotros, y estoy agradecida por ello. Estoy agradecida por todo lo que nos han dado. Son unos seres humanos muy molones (risas).

Angus

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación