Cultura
La constancia vocacional de José Manuel Cumplido publica nueva obra
‘Sócrates, Caín y el mar de Cádiz’ es el compendio de un autor que señala el Aula de Mayores como camino para culminar la pasión por la literatura
‘Vocación’ es un término de origen latino que tuvo, en su origen, una connotación religiosa. De hecho, su primera acepción era «llamada de Dios» . Con el transcurso de los siglos perdió el sentido primero y se transformó en la atracción que sentimos por un oficio, por una actividad profesional o expresión artística. Ya no tiene carácter divino pero conserva el carácter de «llamada». Eso es lo que sintió José Manuel Cumplido siempre hacia la escritura en cualquiera de sus formas. Hacia la poesía, o la prosa, hacia el relato, el cuento, la novela. «Escribir como forma de expresarte, casi terapéutica» resumen.
Durante su carrera profesional en la banca tuvo que aparcar esa pasión por la escritura, aunque nunca la abandonó. Una vez jubilado (también del Latín ‘iubilatio’, «fiesta» o «felicidad») esa preferencia vital ha cobrado más fuerza, más tiempo y más espacio. Califica su vocación como «intermitente» pero nunca desapareció . La prueba es que se ha materializado en un libro publicado a finales de año. El resultado de esa constante pulsión es ‘Sócrates, Caín y el mar de Cádiz’, un libro con vocación de compendio de textos de distinta naturaleza, muchos nacidos del blog, otra herramienta literaria ubicua desde los primeros años del siglo XXI.
«Son textos que abordan desde el realismo y el relato a la poesía, son siempre personales lo que garantiza que tienen un estilo propio, original, para bien o para mal. Todos estamos influidos por lo que hemos leído pero luego lo filtramos con una mirada individual».
El autor está muy agradecido a dos foros, vinculados, que han servido para dirigir esa vocación literaria. Uno de ellos es el Aula de Mayores . Es el departamento de la Universidad de Cádiz consagrado a los mayores de 55 años, donde se imparten multitud de asignaturas, no de forma simultánea, sin exámenes ni objetivos concretos, con una gran participación, un gran compromiso, por parte de una alumnado que acude únicamente por placer y elección propia, «por vocación de aprender».
Allí tuvo contacto, en un curso sobre Tecnologías de la Comunicación, con el Club de las Letras que dirige el catedrático José Antonio Hernández Guerrero . De ahí nació el blog y una participación en ciberencuentros, por culpa de la pandemia, que dieron forma y nuevos estímulos a su pasión por la escritura. «Ha sido una magnífica experiencia» que recomienda a todo el mundo en su misma situación personal y vital, es decir, a personas que ya están en fase de jubilación o prejubilación pero siempre sintieron el impulso de escribir, de aprender y disfrutar con la literatura, como autores y como lectores.
«De pronto, sentí que esa necesidad de escribir sucedía, ocurría, que volvía a ser posible». Como decía Antonio Machado: «Hoy es siempre todavía, toda la vida es ahora. Y ahora, ahora es el momento de cumplir las promesas que nos hicimos. Porque ayer no lo hicimos, porque mañana es tarde. Ahora».