CULTURA
Juan Mera: «Relegar la poesía sería un gravísimo error»
En ‘Cien sonetos mal contados’ el filólogo gaditano presenta una obra llena de sentimientos y espíritu crítico
‘Cien sonetos mal contados’. Así se titula la última obra escrita por un vejeriego apasionado de la literatura, el teatro, la cultura y las artes en general. Juan Mera Gracia es un creador imparable. Este licenciado en Filología Anglogermánica en la Universidad de Cádiz y profesor de inglés en el colegio de las Carmelitas Vedruna desde 1997 no ha dejado nunca de escribir. Tras ‘Yo y mis clásicos’ y ‘Un camino a pedaladas’ llega este libro que como él mismo explica «es mi tercer niño literario».
En el estilo es fiel a sí mismo. «Sigue el esquema poético que muchas veces ha marcado mi forma de escribir y surge del paso del tiempo y la maduración de la persona» , comenta. De hecho esa madurez hace que Mera haya cambiando la forma de escritura en sus tres obras. «He pasado de una obra de teatro, ‘Yo y mis clásicos’, a ‘Camino a pedaladas’ que es un romance y en este caso más de cien sonetos dedicados a temas muy heterogéneos».
La elaboración de estos textos se ha llevado a cabo especialmente durante los últimos tres años aunque Mera plasma en ellos toda su vida. «Quería plasmar la experiencia vital de los momentos que me ha tocado vivir. Los sonetos no nacen porque sí, sino que llevan muchos años naciendo y en los últimos tres años me he dedicado a la composición de esta estrofa clásica que ha sobrevivido en nuestros días».
Precisamente para el autor la influencia de los clásicos es fundamental y en ‘Cien sonetos mal contados’ es algo evidente desde el primer instante. «Desde que me puse hace veintidós años con el grupo de Teatro Candilejas siempre me han enamorado los clásicos. Y esta es una obra con claro acercamiento a los clásicos». En cuanto al hecho de que sean sonetos, Mera indica que « utilizo la estrofa del soneto porque es magistral desde su creación en Italia y luego más tarde en el Renacimiento en España y es una manera muy profunda de decir en una estrofa todo el sentimiento sobre una experiencia vivida».
El libro está dividido en diez bloques y consta en total de ciento tres sonetos. «No quise quitar ninguno. El título del libro me lo regaló un íntimo amigo cuando supo de la existencia de ese número de sonetos. En cada uno de los bloques se exponen los sentimientos que han desbocado o evocado cada uno de los sonetos que se recogen, desde las raíces donde el que me conoce sabe que hablo de Vejer y Santander . El primero es la tienda de mi padre y abuelos donde me desarrollé como persona y Santander porque mi madre es montañesa y entonces todos los veranos de la infancia los pasábamos allí» comenta Juan Mera.
Temática variada
Estos sonetos invitan a la reflexión a partir de la experiencia de un autor que muestra sus sentimientos y pensamientos de forma abierta. «Me confieso en esa ley que es la vida. Todo lo que día a día me complace vivir. Desde un ‘carpe diem’ a lo que es el milagro del amanecer. Pero también aparece como condición indispensable el teatro o hay una parte muy dura en la que el alma se confiesa y que recoge las cosas que le hieren a uno . Un soneto que me costó mucho escribir fue el que dediqué a un alumno que murió en Los Caños, Luis Díaz Morillo. ‘Una falsa corriente’ es el título. También en la última parte desvelo esa madurez de la vida en la que te das cuenta de que no lo puedes tener todo y también en Miscelánea trato de recoger el sentimiento que se acumula durante los años».
‘Cien sonetos mal contados’ es también una obra literaria que invita a mantener una postura crítica ante la realidad actual . Con el libro se intenta sacar a la luz la conciencia crítica del lector como ciudadano en todos los campos, político, social, religioso, educativo... «Soy un hombre de la vida y veo lo que hay; los políticos se llevan el primer puesto en mis críticas . Esa rebeldía como ciudadano está en los sonetos porque no admito la incomprensión y el pamplineo. Desde el uso de la mala palabra al uso de los capitales que pagamos con nuestros impuestos».
La cultura es otra de las grandes pasiones de este autor y por eso cuando se centra en los temas clásicos hay un apartado dedicado a ella. En este sentido Juan Mera explica que «siempre he peleado por ello y me fijo en la herencia del griego y el latín y de un hombre como Cervantes que ha sido incluso más reconocido fuera de este país. Junto a ello la música clásica también está muy presente en este libro. Creo que para mí es una de las grandes asignaturas pendientes de la vida ojalá de pequeño hubiera podido ir al Conservatorio, la verdad es que me hubiera encantado».
Creencia
Juan Mera no oculta sus creencias y es de sobra conocido que es un apasionado del mundo cofrade al que además está muy vinculado. Es hermano de distintas cofradías y ha escrito numerosos pregones y exaltaciones. Quizá uno de sus mayores retos fue anunciar en 2017 la Semana Santa de Cádiz . Esta faceta no queda al margen en su libro sino todo lo contrario. «Soy un hombre que demuestra públicamente mi fe y mis devociones que están muy presentes. Sería imposible desvincularlo a mi forma de ser. Pero también hago una defensa en favor de la palabra, del respeto a la creencia que se opone a todo partidismo político por tal de poner una etiqueta al que crea o no crea. Para creer no hace falta ser político ni hay que ser político para no creer. Ese es el gran error de los mandatarios que nos gobiernan», afirma.
La editorial Canto y Cuento de Jerez publica este libro que acaba de salir de imprenta y ya se puede comprar en librerías de Cádiz y de otras localidades de la provincia. Este viernes se presentaba en Cádiz en un acto en el que integrantes del grupo Candilejas y amigos cercanos del autor leyeron algunos de los sonetos y mostraron el claro mensaje de Juan Mera. « La poesía se puede seguir escribiendo con mayúsculas y puede comunicar al mundo muchísimo, de manera muy profusa. Es parte de nuestra herencia y acerbo cultural, relegarla sería un gravísimo error como sucede con tantas cosas que estamos viendo y es un arma magnífica para comunicar y para denunciar».