Gay Talese y Frank Sinatra, enemigos íntimos
Un libro recupera el perfil que el escritor y periodista elaboró para 'Esquire' sobre el cantante, que se negó a ser entrevistado
En el número de abril de 1966 de la revista estadounidense 'Esquire' apareció publicada una de las historias que encumbarían al llamado 'nuevo periodismo' hasta los altares de la literatura, sin miedo a pugnar, de igual a igual, con ella. Llevaba la firma de un joven Gay Talese –por entonces tenía 34 años y acababa de dejar 'The New York Times–, y su título, 'Frank Sinatra has a cold' , da una idea de quién era el protagonista del retrato: 'La Voz' .
[Gay Talese: «Hoy no podría escribir ni una palabra en la prensa»]
Ahora, aquella célebre piez a, que en 2003, con motivo del 70 aniversario de la publicación, fue calificada por el 'staff' de la revista como «la mejor historia jamás publicada» en la cabecera, resucita en formato libro gracias a la editorial Taschen . El minucioso retrato, que fusiona hechos verídicos con una narración brillante, se publica, en edición limitada, junto con notas y correspondencia del archivo de Gay Talese e imágenes de Phil Stern , el único fotógrafo que tuvo acceso a Sinatra durante cuatro intensas décadas.
Pero, más allá de lo noticioso de su rescate editorial, la escritura de la pieza tiene una historia en sí misma, y merece la pena contarla. En 1962, Talese había publicado, también en 'Esquire', 'Joe Louis: The King as a Middle-Aged Man' , reportaje en el que retrataba al legendario boxeador después de caer en el olvido. Louis no opuso objeción alguna a la pieza, se mostró colaborador y dio al periodista todo tipo de facilidades, pero Sinatra no quiso ser entrevistado, pese a la insistencia de los mandamases de 'Esquire', por lo que Talese se las apañó, como él sólo era capaz de hacer, para hablar sobre 'La Voz' sin tener una sola declaración del protagonista del perfil.
Portazo
Aquel portazo no impidió que el perfil saliera adelante, a pesar de los 5.000 dólares que 'Esquire' tuvo que desembolsar en la 'cartera' de Talese. El periodista siguió durante tres meses al cantante y entrevistó a todo aquel de su círculo familiar, amistoso y profesional que quisiera 'cantar'. Así, Talese pudo aproximarse a la volátil y controladora personalidad de Sinatra, extremadamente celoso de su intimidad, y relató la relación que mantenía con sus exmujeres – Nancy Barbato y Ava Gardner – y sus hijos.
Lo cierto es que, entonces, Sinatra no necesitaba publicidad, pues, a punto de cumplir 50 años, estaba en el mejor momento de su carrera, aunque su vida personal seguía acaparando titulares, especialmente por la relación que en aquella época mantenía con la actriz Mia Farrow , a la que sacaba treinta años. Además, la CBS acababa de emitir un controvertido documental sobre la vida del cantante en el que se atrevió a tocar uno de los temas más controvertidos de su carrera: su conexión con la mafia . En su pieza, Talese llegó a definir a Sinatra como 'El padrino' y se 'infiltró' en su salón la noche en la que vio el documental con su familia.
Sinatra era entonces sinónimo de éxito, no sólo en la industria musical, sino también como empresario. Pero el perfil periodístico de Talese ahondó en sus preocupaciones, entre ellas el especial televisivo que estaba preparando para el canal NBC titulado 'A Man and His Music'.
Así comenzaba el tercer párrafo de la pieza publicada por 'Esquire': «Sinatra con un resfriado es como Picasso sin pintura, como un Ferrari sin gasolina, pero peor». Una definición casi perfecta.
Noticias relacionadas