Un diario de la cuarentena para luchar contra el coronavirus
Pedro Touceda publica su cuaderno de bitácora y destinará a Cáritas los beneficios
El confinamiento nos quitó la libertad, pero nos regaló (nos impuso) una cantidad ingente de tiempo encerrados entre cuatro paredes. Horas y horas que había que rellenar, que ocupar, que invertir, que se acumulaban como el polvo de los muebles o se estiraban como chicles. Pedro Touceda , periodista y autor de una novela reciente, «Los elefantes andan descalzos y no usan paraguas» (Letrame), decidió dedicarlas a la escritura, y cada día de la cuarentena más estricta, antes de los benditos paseos de la desescalada, fue publicando religiosamente relatos, recuerdos y apuntes en su muro de Facebook. Ahora, que aún seguimos camino de la nueva normalidad, ha decidido recoger todos esos textos y juntarlos en un libro, « Cuaderno de bitácora de una cuarentena » (Las nueve musas), que estará a la venta en Amazon a partir de hoy y cuyos beneficios irán directos a Cáritas y su lucha contra el coronavirus.
«La premisa era no hablar nada de política, no hablar nada de lo que ya se había recogido en los medios, ser libre y escribir lo que me fuese surgiendo cada día», cuenta al otro lado del teléfono. El resultado es un conjunto heterogéneo de textos (cuarenta y cinco en total) que lo mismo hablan del día del padre como del tamaño de las distintas habitaciones de su casa, redescubierta en estos meses, o del día que una mosca irrumpió en su morada y despertó cierta preocupación relacionada con el virus... Historias variadas, que toman la forma del relato con moraleja o de la prosa más experimental, entre otras variantes. «El plan era contarlo sin un esquema fijo, que se notase el estado de ánimo de cada día, y que la interrelación con los lectores de Facebook fuese propiciando el relato», apostilla.
En la biografía del libro, Touceda se define como « explorador artístico », pues se ha expresado a través de muy diferentes medios: literatura, fotografía, cine… Esa búsqueda, ese espíritu ecléctico, es el que se filtra en estas páginas. «Es una experiencia creativa en un momento en el que la libertad está condicionada por una situación de pandemia. Es una búsqueda de la libertad dentro de la falta de libertad. He disfrutado mucho escribiendo el libro. Además, me parece muy bonito que en el momento que escribes y lo publicas en Facebook la gente ya te esté diciendo qué le parece... Es una experiencia enriquecedora», desgrana.
Dice Touceda que dentro de esa variedad de temas y estilos que llenan su nuevo libro hay un nexo, un pegamento común. No es otro que el de la esperanza y la evasión . Lo que ha intentado, insiste, es compartir la experiencia del encierro y hacerla más amena, la suya y la de los demás, sus lectores: «Todo te va afectando, la lluvia informativa te empapa, y mi trabajo era filtrarlo». Eso sin olvidarse, claro, del humor, fundamental para sobrevivir a ciertas tardes de miedo o hastío. «Hay que guardar respeto y sentir el drama, pero no está prohibida la risa», subraya.