ARTE
«St_age»: Una propuesta «on» y «off line» necesaria
La TBA21 vuelve a entrar en el Museo Thyssen con un proyecto de producción artística que también alcanza el ámbito digital
Hace unos días reflexionaba en estas páginas sobre la dramática crisis mundial ocasionada por el Covid-19. Dentro del preocupante contexto, el mundo del arte -y el de la cultura- ha sido uno de los más castigados por sus especiales características, al ser tantas veces considerado como lujo prescindible, y a la precariedad que habitualmente le acompaña. En clara sintonía con estas reflexiones, TBA21 ha concebido un ambicioso doble proyecto.
Por una parte, st_age , una plataforma digital colaborativa cuya finalidad es la de dar a conocer obras de arte producidas ex profeso para este espacio virtual. El objetivo fundamental de esta propuesta es pues el de apoyar a los artistas ante la grave crisis provocada por la pandemia. Y lo hace con una voluntad que se expande más allá del puro ámbito del arte. Así, en palabras de Francesca Thyssen-Bornemisza , fundadora de Thyssen-Bornemisza Art Contemporary (TBA21) , «st_age refleja una nueva misión de la fundación: generar estructuras sencillas para producir obras de la manera más ética y solidaria. ¿Cómo podemos relacionarnos con los demás, humanos o no, para fortalecer redes sociales y construir una comunidad de apoyo y solidaridad? st_age es un refugio y espero que solo sea la punta del iceberg».
Ampliar horizontes
El espacio digital st_age , en su primera temporada hasta diciembre, irá presentando paulatinamente un conjunto de 11 proyectos encargados a otros tantos artistas y colectivos internacionales. Proyectos que no sólo se circunscribe a un propósito tan loable como es el de ofrecer alternativas de trabajo, producción y futuro al mundo del arte, sino que trata de ampliar esos horizontes hasta espacios más globales que apuntan a muchas de las principales preocupaciones y metas de nuestra sociedad más actual. Sostenibilidad, responsabilidad, colaboración, mutuo apoyo, interacción, solidaridad, diálogo, visibilidad o compromiso con el medio ambiente son algunos de los conceptos que orbitan alrededor de la propuesta.
Junto a ello, y en relación directa, se propone una muestra, Avanzar con paso leve. st_age expandido , que vendría a ser su reflejo y proyección expositiva, es decir, su plasmación material y tangible. Ese espíritu colaborativo es una de las sensaciones que nos invaden al contemplar la exposición, al percibir esa certeza, cada vez más palpable y visible, de una omnipresente globalidad que contrae el mundo que habitamos, y que curiosamente, al tiempo, lo dilata, pluraliza y enriquece.
Así encontramos artistas de muy diversos contextos, desde India a Chile, Arabia Saudí o EE.UU., que plantean cuestiones no menos diversas pero que igualmente sentimos como comunes a todos y que responden a una serie de temas clave, ocho en total, que, en su variedad, proponen un compromiso con la sostenibilidad de nuestro planeta, una voluntad de recuperar los lazos que siempre han ligado al ser humano con la maltratada Naturaleza , un deseo de potenciar la convivencia y la igualdad desde nuestras propias y necesarias diferencias, y la búsqueda de nuevas vías de espiritualidad para construir un futuro mejor. Sin duda, elevadas ambiciones que podrían parecer, sí, que entrasen más en un ámbito de lo utópico que de lo real, pero ¿qué es lo que al fin y al cabo le quedaría al arte sino esa continua y obsesiva aspiración a generar sueños y utopías?
Tomen nota
Dentro de la gran variedad de miradas que se muestran a través de un total de once proyectos concebidos y realizados por una amplia nómina de creadores -Dana Awartani, Patricia Domínguez, freq_wave, Dorine Mokha, Courtney Desiree Morris, Eduardo Navarro con BaRiya, Christian Salablanca Díaz, Saraab, Yeo Siew Hua, Himali Singh Soin con David Soin Tappeser y Daniel Steegmann Mangrané-, quiero señalar los que considero especialmente atrayentes y significativos. Pienso, entre otras, en obras como el cortometraje An Invocation to the Earth , de Yeo Siew Hua , pieza que inaugura la primera temporada de este proyecto; la instalación Huertos de los ch´olti , de Naufus Ramírez-Figueroa ; el videopoema de Christian Salablanca Geometría del centro ; la animación de Eduardo Navarro Octo-Durga, Panther Dreaming ; la pieza de simulación virtual de Daniel Steegmann , único español presente; o la peculiar y barroca videoinstalación de Patricia Domínguez La balada de las sirenas secas .
Mención especial merece, por último, el excelente diseño de montaje que sabe entretejer con eficacia la doble dimensión, digital y física, de esta singular propuesta.