ARTE
Pedro Calapez: Una pintura en llamas
La galería Fernando Pradilla ofrece el diálogo entre el color y la estructura propio del artista portugués
![Exposición de Calapez en la galería Fernando Pradilla](https://s3.abcstatics.com/media/cultura/2020/11/06/calapez-kZ7F--1248x698@abc.jpg)
Pedro Calapez (Lisboa, 1953) posee una inquebrantable voluntad pictórica . Su trabajo toma como punto de partida este medio, pero al tiempo cuestiona su especificidad. Este interés por superar los tradicionales límites de la técnica no responde a un mero juego formal. El artista sabe que unos de los principales problemas de la pintura contemporánea ha sido su fetichización como objeto y, por ello, articula diferentes modos de expansión . Por ejemplo, interviene en dispositivos tridimensionales que exigen un recorrido en torno suyo, o crea polípticos donde quiebra la continuidad del plano vertical.
Pero siempre subyace un objetivo: elaborar una abstracción reflexiva que, si bien no se ciñe a ninguna composición modular, se construye a partir de la relación entre el color y la estructura. Sobre ello profundiza en la actual cita, la primera en Fernando Pradilla , que recoge su producción de los últimos ocho meses. Son obras complejas , que solicitan del espectador diversos grados de proximidad: en detalle, revelan una materia pictórica variable en sus ritmos y densidad.
De lejos, ofrecen composiciones y diálogos cromáticos muy meditados , pero nada complacientes: los puntuales desequilibrios y disonancias tonales funcionan como cebos que capturan la mirada. En estas piezas, de extraña y fascinante belleza, también podemos localizar sutiles alusiones a diversos capítulos de la modernidad pictórica. Pero, más allá de un discurso sobre lo abstracto, su historia y posibilidades, Calapez plantea el necesario ejercicio de sobreponernos a una mirada pasiva y anestesiada.