LA URRACA

La nueva masculinidad

«Yo pensaba que esos temas eran antiguos y que todos éramos, simplemente, personas», sostiene el autor del artículo

El escritor asturiano Antonio J. Rodríguez
Andrés Ibáñez

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El libro La nueva masculinidad de siempre de Antonio J. Rodríguez me ha interesado mucho sobre todo porque se adentra en territorios de la cultura contemporánea que me son desconocidos. También me hace reflexionar sobre el tema de la masculinidad . Intento pensar qué significa el término para mí, y es poco, muy poco lo que encuentro, por no decir nada. «Virilidad», menos todavía. Eso de «ser un hombre» no estaba en mi educación , y mis padres jamás me transmitieron ningún valor «masculino». Tampoco me hablaban de cómo tratar a las mujeres. Estas cosas uno las aprende viendo la forma de comportarse y de relacionarse de los padres. Los míos eran personas cultas, civilizadas y sensibles, y hay un montón de cosas que me enseñaron sin tener que decirme al respecto ni una palabra.

Más tarde, en el colegio me encontré el machismo brutal y soez que acompaña las vidas de todos los hombres, los verdaderos machistas (que son los menos) y los que tienen que adaptarse, a menudo fingiendo que comparten esos valores o, como era mi caso, intentando ignorarlos huyendo de la horda . Creo que mis hijos, en estos años tan lejanos de los 60 y del franquismo, han tenido similares experiencias. Quizá porque viví esos modelos brutales y primitivos de ser «un hombre» siempre he sentido rechazo al concepto de masculinidad. No es que esto me planteara dudas sobre mi sexualidad, pero nunca me he sentido cómodo en el rol de hombre ni me ha gustado que me traten como hombre, ni los hombres ni las mujeres. Me extraña que se plantee la existencia de una «nueva» masculinidad porque para mí la masculinidad no existe. Sackville-West decía que las distinciones entre los sexos se irían borrando porque en realidad ambos son muy parecidos. Lo que está pasando es lo contrario: una especie de exacerbación de la diferencia que me obliga a pensar, a estas alturas, qué significa para mí la masculinidad cuando yo pensaba que esos temas eran antiguos y que todos éramos, simplemente, personas.

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