ARTE
José Miguel G. Cortés dejará la dirección del IVAM este año al no renovar contrato
Tras seis años en el cargo, la Generalitat Valenciana decide no renovar al actual director del IVAM, cuyo contrato culmina en septiembre. Un inminente concurso público le buscará sustituto, mientras Cortés carga contra la decisión en sus redes
A José Miguel G. Cortés se le ha atragantado el día y la semana de los museos de 2020. De nada ha servido, de hecho, haber sido uno de los primeros centros españoles en abrir sus puertas en esta desescalada post-covid, o el apuntarse el tanto de ser el primero en inaugurar exposición totalmente renovada tras la pandemia (el proyecto de Jorge Peris presentado este mismo lunes).
Este mes de septiembre expira su contrato como director del IVAM tras seis años en el cargo. La Consellería de Cultura de la Generalitat Valenciana, capitaeada por Vicent Marzà, de Compromís , le anunció ayer que este no se verá prorrogado, tal y como informa hoy Diario Levante, y como está haciendo público en sus redes el todavía director de la institución.
La posibilidad de prórroga por dos periodos de otros seis años cada uno era algo que contemplaban como posibilidad el contrato firmado por ambas partes y el concurso público por el que Cortés accedió a la dirección del IVAM en 2014, cuando sustituyó por entonces a Consuelo Císcar , tras una más que turbia gestión de una década que acabó en los tribunales por presunta malversación, prevaricación y fraude.
Dos por el precio de uno
La decisión adoptada por el ejecutivo autonómico afecta asímismo a Sergio Rubira , Subdirector de Colección y Exposiciones del centro (que ocupa ese puesto desde 2017), y que es en buena parte el que precipita la decisión, en la búsqueda de una respuesta a su propia situación personal , dado que su contrato también expiraba pasado el verano.
Para Cortés, tal y como se puede leer en su cuenta de Facebook, esta es «una decisión política que abre una profunda crisis en el IVAM»: «Después de seis años de uro trabajo, el Conseller ha decidido no renovarme el contrato , atribuyéndose una decisión que debe tomar el Consejo Rector [del centro] . Igualmente, decide no renovar al Subdirector de Colección y Exposiciones y desmantela el equipo que ha dirigido el IVAM estos últimos años».
Para Cortés, tal y como se puede leer en su cuenta de Facebook, esta es «una decisión política que abre una profunda crisis en el IVAM»
La Generalitat Valenciana se ampara en la nueva Ley del IVAM, aprobada en 2018 , para defender su decisión, que, según fuentes de la misma, imposibilitaría desde el punto de vista jurídico la prórroga, dado que la misma fija una dirección dividida entre artística y gerente, un modelo distinto con el que el actual director entró en el museo, lo que obligaría, en su opinión, a realizar un nuevo concurso público , algo que el gobierno autonómico prevé realizar en breve para que el nuevo director tome el relevo antes de la salida de Cortés en septiembre. Sus bases se publicarían el próximo mes de junio, atendiendo a principios de mérito e idoneidad , y en base al código de buenas prácticas. Nada impediría al actual director a presentarse al mismo, algo que, de momento, rechaza de plano.
La decisión adoptada y que afecta a director y subdirector del museo viene motivada ante el silencio administrativo por parte de la Generalitat al ser reiteradamente consultada sobre la continuidad de ambos gestores en sus respectivos cargos. Silencio que llevó hace unos días a que, Juan Antonio Álvarez Reyes, el presidente de ADACE (la asociación de directores de museos de España) elevara una carta al presidente autonómico Ximo Puig , con copia al conseller y a la vicepresidenta Mónica Oltra, e ntre otros cargos, para solicitar la renovación del mandato de Cortés.
Un periodo muy oscuro
En opinión de la asociación, este «ha logrado los objetivos propuestos» y «ha dado certidumbre y confianza en la gestión de la situación actual que requiere esta gran institución», tras un periodo anterior «muy oscuro». Para ADACE, los últimos seis años de José Miguel G. Cortés al frente del IVAM ha resultado «una vuelta al prestigio perdido , en un momento tan difícil y turbulento como el actual, en el que se requiere dar seguridad y confianza en nuestras instituciones, también en las culturales». Por esta razón, en ese momento, se solicitaba la renovación de su contrato «que aún no se había puesto en marcha».
A nadie se le escapa, desde luego, que la decisión adoptada ayer por el conseller Marzà –y denunciada en redes por el todavía director del IVAM– tiene que ver con la escasa sintonía entre ambos , sobre todo, ante las manifestaciones públicas de su consejería de que el relanzamiento del IVAM tiene que pasar por la popularización de sus contenidos . El culebrón –en el que ADACE vuelve a ver una ingerencia política basada en un cambio en la denominación de un puesto , un gesto que recuerda mucho a la destitución de Rafael Doctor de la dirección del Centro Andaluz de Fotografía –, no ha hecho más que comenzar, y sus siguientes capítulos se desarrollarán en las próximas semanas.