PERIODISMO
Ilustración y periodismo, una historia de amor
Grandes ilustradores se reúnen en unas jornadas culturales en Madrid en las que hablan de su relación con el periodismo, definiendo las viñetas como una forma de dibujar la realidad que nos rodea
Situado en el ala sur de la Plaza de Callao, en Madrid, el Hotel Florida fue construido entre 1922 y 1924. Esta obra de Antonio Palacios alojó a la mayoría de los corresponsales extranjeros en Madrid durante la Guerra Civil , como Hemingway, Capa o Saint-Exupéry. El edificio fue derribado en 1964 y sobre su solar se construyeron unos grandes almacenes que, aunque en un principio pertenecieron a Galerías Preciados, tras su quiebra acabaron en manos de El Corte Inglés. Esta semana, el histórico establecimiento vuelve a cobrar vida en forma de homenaje.
Gracias a unas jornadas de debate organizadas por Ámbito Cultural y por la revista digital fronterad , se revive el Hotel Florida. Se prolongarán hasta el viernes 24 de enero . En ellas participan escritores, ilustradores, periodistas, fotógrafos e historiadores vinculados con la política internacional y el periodismo bélico.
Guiados por el celebrado guionista de historietas, Felipe Hernández Cava, Alfredo, Antonia Santolaya, Ana Julia y Raúl se dedicaron a contar sus experiencias explicando el oficio de como traducir la realidad en ilustraciones, a una sala llena, a pesar del inclemente frío madrileño.
Alfredo, Premio Nacional de Ilustración en 2017, fue la figura principal del evento. El asturiano alberga una gran trayectoria en libros y en numerosos periódicos españoles como El País, El Mundo y La Razón. Fue el primero en hablar, rememorando historias de su carrera, manifestando en público unas palabras que él mismo había escrito: «La verdadera biografía crece con nuestra colaboración y voluntad. Los viejos solo somos espectadores, insólitos y contrariados», comentó antes de empezar a rememorar algunas de sus experiencias. «Asistí a eventos más apropiados para un periodista avezado que para un dibujante acobardado» , comentó con el humor que permite la edad. «Estuve en el juicio del 23-F y también en la visita de la Reina de Inglaterra y su consorte», continúa el ilustrador.
Compañeros de viaje
A pesar de la juventud comparativa, el resto de los participantes no se quedan cortos en sus logros. Ana Juan , Premio Nacional de Ilustración 2010 , ha sido dibujante, en sus palabras, de «conflictos, catástrofes y otras crisis», para el New Yorker . Antonia Santolaya ha trabajado en la revista M21 , ha publicado varios libros y es la ilustradora de Feminismo para principiantes , de Nuria Varela. Raúl Fernández Calleja consiguió el premio a la Novela Gráfica en el salón Roma y es ilustrador de La Razón.
Pese a lo diferente que pueda parecer el periodismo tradicional, los ponentes dejaron ver varios puntos en común. Alfredo describió el género como un acompañante de los géneros tradicionales , «somos compañeros de viaje», dijo, mientras que Antonia recordó la importancia de entender Argelia al hablar de su libro Bienvenidos a mi país . Para Ana Juan, «cada portada tiene una historia detrás, me he convertido en la dibujante de las catástrofes, de las crisis. Tuve el honor de encabezar esa visión trágica de la vida, quizás por mi sensibilidad. Busco un camino para transmitir de una forma más intensa, sin llegar a mostrar sangre, pero yendo un poco más allá de los sucesos que han ocurrido».
«Quizás los directores de arte cuando quieren verse sorprendidos no llaman a un fotógrafo, sino a un dibujante, ya que es una forma más profunda de transmitir lo que no se capta en una simple secuencia» , declaró el moderador, Felipe Hernández, después de que los ponentes expresaran su preocupación por la homogeneización del género. «Hay momentos en que los nuevos dibujos se ven todos iguales, son como fotos de ordenador», añadió Alfredo.
De momento, con esta preocupación, se cerró el segundo día de este homenaje. Hoy saltarán a la literatura, y seguirán intentando mantener vivo el espíritu del viejo periodismo , en una época donde cada día parece más complicado.