ARTE
Apertura: diez nombres para diez años
Una década llevan las principales galerías de Madrid (las integradas en la asociación ArteMadrid) celebrando de forma conjunta el arranque de temporada. De las propuestas de este año, visitables desde hoy, señalamos diez imprescindibles
1
Francesc Torres (G. Elba Benítez)
«De colisiones en la autopista de la historia» es una buena oportunidad de volver a ver la personal visión de Francesc Torres , un artista que trabaja con diversos lenguajes –foto, vídeo, texto, comisariado o instalación–, encaminados a plantear conexiones críticas con la Historia, y con los factores políticos y sociales que la sustentan. Con la presencia de unos paneles, pintados por José María Sert, incendiados durante la Guerra Civil, y que podrían parecer cuadros abstractos informalistas, junto a un texto curatorial, establece una curiosa reflexión sobre las ideologías, el poder, la Historia, el papel de las imágenes y el propio arte. Todo esto es lo que entra en Elba Benítez .
2
Cecilia Paredes (G. Blanca Berlín)
«Hay tanta soledad en ese oro…». Este verso de Borges le sirve a Cecilia Paredes como hilo conceptual y formal para tejer una propuesta en Blanca Berlín sobre sus temas esenciales: la memoria, la identidad, lo natural... La artista, destacada figura del panorama latino, presentará unas singulares imágenes en lino con diversas iconografías, de cartas astrales hasta ilustraciones botánicas o zoológicas, con las que establece simbólicas conexiones entre pasado y presente, lo sideral y lo terrenal, junto a sus conocidas fotoperfomances, en las que integra novedades interesantes.
3
Jacobo Castellano (F2)
El trabajo de Jacobo Castellano oscila entre dos fuerzas que se separan y se complementan: lo lúdico y lo trágico. La muestra «Chiste o chapa», en F2 , propone además otra relación dicotómica entre lo intangible y lo puramente físico, que es un claro material escultórico. Piñata y Torno, piezas recientes de gran formato, remiten al juego infantil, siempre ligado a lo violento, y a una estructura ambivalente que sirve tanto para ocultarse como para ser visto. Personajes, inspirada en Goya, es una reflexión sobre ese componente ambiguo tan presente en su obra.
4
Fernando Sinaga (G. F. Pradilla)
A partir del predicado filosófico «Panta rhei», atribuido por Platón a Heráclito, Fernando Sinaga elabora un proyecto del mismo título en Fernando Pradilla que, junto a otros trabajos más escultóricos, tiene como eje la presentación de un amplio conjunto de cartones, un material de experimentación recurrente en su obra de las últimas décadas. Piezas que suponen la creación de un espacio mental y físico, regido por el azar y los procesos automáticos, y al que dota de una carga temporal y emanante con el que alcanza interesantes niveles formales y narrativos.
5
«Biomorfismo» (G. G. de Osma)
Guillermo de Osma continúa con su labor difusora del arte de las vanguardias con «Biomorfismo 1920-1950» , una excelente selección de artistas que en esas fechas trabajaron con una tipología de formas pertenecientes al noble linaje plástico de lo orgánico y lo biomórfico. Sus grafías, sencillas y mayormente curvilíneas, producen una sensación de dinamismo y continua transformación. Obras muy diversas de autores igualmente plurales como Léger, Picabia, Arp, Kandinsky, Bellmer. Miró, Le Corbusier, Palencia, Mallo, Goeritz o Saura, entre otros.
6
Jimena Kato (Twin Gallery)
Las obras de Jimena Kato en Twin Gallery buscan la relación entre ciertos procesos escultóricos y determinadas estructuras, más vinculadas a la arquitectura y a lo constructivo, que a su vez se com- plementan con otros lenguajes. Su propuesta consiste en una serie de piezas volumétricas (cerámica, cemento, arena y cera), que juegan con lo articulado, el equilibrio, el peso o la verticalidad. Asimismo, en un vídeo de un bailarín retirado reflexiona sobre el cuerpo, sus dificultades, sus posibilidades, sus conquistas y su intrínseca belleza.
7
M+M (Galería Helga de Alvear)
Primera muestra en Madrid del tándem artístico M + M (Marc Weis y Martin de Mattia) . No es habitual ver proyectos que intenten un diálogo entre cine y plástica. «7 Days», en Helga de Alvear , es una instalación multicanal que presenta siete escenas que cuestionan aspectos temporales y de identidad. The «8th Day», relacionada con la anterior, es una compleja narrativa con referencias al cine del siglo XX. Finalmente, «The Scorpion's Sting» remite a «L´Âge d´Or» de Buñuel, y es una interpretación de la mítica película por seis artistas actuales.
8
Aitor Ortiz (G. Max Estrella)
El trabajo de Aitor Ortiz en Max Estrella intenta expandir los límites del puro registro visual para ahondar en las posibilidades de la representación fotográfica, fundamentalmente vinculada a la arquitectura industrial. En este contexto surge «Link», proyecto en el que, a partir de la captación de planchas de acero de una conocida fábrica de Bilbao, construye unos metálicos paisajes, casi abstractos, llenos de líricas texturas y matices monocromos: una reflexión emocional sobre el tiempo pasado y un tejido industrial en vías de desaparición.
9
Baselitz (G. Pilar Serra)
Una exposición de Baselitz es siempre motivo de recomendación. El viejo rockero germano –inútil glosar aquí su importancia– nos propone una espléndida suite nueva de 32 grabados calcográficos titulada «Devotion», inspirada en autorretratos de artistas a los que admira o por los que ha sido influido, con su característico sello de imágenes invertidas. Nombres del presente, como N. Eisenman o T. Emin, y de un pasado aún no tan lejano como Kirchner, Heckel, Dix o Rothko, que suponen más que un simple homenaje. Es la apuesta de Pilar Serra .
10
Jong Oh (Sabrina Amrani)
Este nuevo espacio en Carabanchel albergará «Sunstone», d e Jong Oh , artista de singular trayectoria (nacido en Mauritania, creció entre España y Corea y vive en Nueva York). Esa biografía influye en su trabajo, unas esculturas mínimas realizadas in situ, en respuesta al específico lugar en el que se crean, el espacio de Sabrina Amrani . Son estructuras de materiales sutiles y humildes, que parecen suspendidas en el entorno, como ligeros dibujos tridimensionales, y que transmiten una suerte de mensaje poético y casi audible: «El sonido del espacio».