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Open House Madrid: maratón de arquitectura para este fin de semana

Este fin de semana se celebra la primera edición de Open House Madrid, un festival que, en las ciudades en las que se asienta, invita a visitar sus edificios más emblemáticos con otros ojos. Y, de paso, aprender a amar la arquitectura

Open House Madrid: maratón de arquitectura para este fin de semana ohm

javier díaz-guardiola

Hace 23 años, una pedagoga británica se propuso dar respuesta a una queja que escuchaba de arquitecto en arquitecto hasta transformarse en machacona letanía: «¿Por qué la gente no entiende lo que hacemos?», se lamentaban. «¿Por qué se nos ve como marcianos que construimos de espaldas a los ciudadanos con el único propósito de llenarnos los bolsillos?». Victoria Thornton –nombre de aquella pedagoga–, daba en todos los casos la misma respuesta: «Dejadles pasad. Dejadles entrar en lo que hacéis y así podréis explicaros. Nadie mejor que uno mismo para hacerlo». Esta idea tan simple dio pie al primer Open House en Londres (que el fin de semana pasado cumplió, decíamos, 23 convocatorias abriendo las puertas de los edificios más simbólicos de la urbe), con tanto éxito desde entonces, que ella es hoy un referente de la disciplina en Reino Unido , cuya labor ha sido reconocida con la Orden al Mérito concedido por la Reina de Inglaterra.

Tras la capital inglesa, se fueron sumando otras ciudades. La lista supera hoy la treintena , y en ella se incluye, desde 2010, Barcelona, que en octubre acometerá su sexta edición. Madrid se estrena este fin de semana gracias al tesón de la arquitecta Paloma Gómez Marín y la comisaria y consultora Pati Núñez : «Trabajando en la difusión de la arquitectura –cuenta esta última–, forma parte de nuestro día a día plantearnos cómo hacerla llegar al gran público. Y me parecía inconcebible que no se hiciera en Madrid algo similar a Open House. Así fue como nos pusimos en marcha».

Frontera impenetrable

Porque, a juicio de las organizadoras, tanto en el arte como en la arquitectura, existe una frontera infranqueable que separa al especialista del no iniciado: «Los entendidos conocen las gramáticas y aceptan las propuestas arriesgadas , pero lo que se termina por “perdonar” en arte, por eso de ser cultura, no se pasa por alto en arquitectura, precisamente porque esta tiene que ser funcional. Eso obliga al arquitecto, más que nunca, a explicarse».

Las visitas, que afectan a más de cien edificios, son en todos los casos gratuitas y guiadas

Hasta 140 edificios (muchos de ellos, cerrados normalmente a cal y canto) y de la más variada naturaleza, están dispuestos a darse esa oportunidad en Madrid desde el sábado. Cuatrocientos voluntarios se encargarán de ello , guiando las visitas, siempre gratuitas y a todos abiertas. Uno de ellos, la Casa de las Flores , de Secundino Zuazo, es buen ejemplo de la necesidad de la iniciativa: «Quizás pueda parecer anodina, pero sólo cuando te cuentan que es referente porque su autor consiguió “retirarla” de la calzada para ampliar las aceras, o que el retranqueo de sus balcones busca la luz solar, te fijas en ella, la valoras. Y si lo haces con más edificios, valoras todo un entorno. Nos gusta decir que este es un festival de arquitectura, pero también, y sobre todo, de la ciudad, que no es caprichosa en sus formas».

Joyas para todos los gustos

La nómina final de edificios incluye joyas de la disciplina como la Fundación Francisco Giner de los Ríos , la polémica Torre de Madrid o el gimnasio del colegio Maravillas , reflejo este último de esos encargos que enamoran a su autor (el arquitecto Alejandro de la Sota ) y ofrecen unos resultados que superan los requerimientos iniciales. Cuenta con equipamentos con los que estamos familiarizados (de Las Ventas a La Casa Encendida o el Zara de Serrano), que se invita a mirar de otra manera; palacios, museos, estudios ( AGI, Moneo , Nieto y Sobejano ...). La selección la rubrica un comité asesor que ha incluido, entre otros, a Juan Herreros o a la directora ejecutiva de los premios Pritzker, Martha Thorne. Por sus características especiales, algunos como el Palacio de Liria o el Banco de España, requerían de inscripción previa. Esta condición afecta tan sólo al diez por ciento del total. Para el resto, basta con entrar en la web del festival , consultar horarios y generar un recorrido propio.

El programa se completa con actividades paralelas, como las visitas que propone la revista AD a once selectas viviendas privadas , los circuitos por estudios de arquitectos organizados por la firma Figueras o las rutas por espacios abiertos (Madrid Río, El Capricho, Ecópolis Plaza), promovidos por la Universidad Camilo José Cela . El congreso El futuro de las ciudades (El Ser Creativo y Grupo TPI), satisfará a los profesionales. Iniciativas no faltan. No es este un fin de semana para quedarse en casa. Más bien, para «asaltar» la de los demás.

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