arte
PHotoEspaña se cuela en los estudios de los artistas de Madrid
PHotoEspaña pone en marcha este fin de semana y por vez primera sus «PHestudios»: visitas guiadas a los talleres de los colectivos de Madrid, pero también a sus bares y discotecas
«Hay una pelea e importa que pase»; o «Este cartel traiciona el proyecto» . Es posible que durante las últimas semanas se haya topado con estos eslóganes en determinados anuncios en el Metro de Madrid y que le hayan llamado la atención. No se asuste : son parte de una iniciativa artística, la que lleva por título Imagen no disponible , y cuyos actos centrales se desarrollarán este fin de semana.
Y es que PHotoEspaña , con el apoyo de la Comunidad de Madrid, pone por primera vez en marcha el programa «PHestudios», un proyecto que apoya a los jóvenes creadores y los colectivos artísticos que trabajan en la capital, ayudándolos a dar a conocer su trabajo. Emilia García-Romeu y Selina Blasco son sus comisarias y así explican su cometido: «Desde sus comienzos –apuntan las responsables–, PHotoEspaña se ha centrado siempre en la fotografía, aunque se ha abierto a otras manifestaciones visuales. María García Yelo , su nueva directora, quería ampliar sus posibilidades, por lo que se puso en contacto con Selina por su vinculación con la universidad. En un principio, se pensó en un formato cercano al del seminario , pero le dimos la vuelta para que fuera un reflejo de lo que los artistas plásticos desarrollan en la ciudad de Madrid».
Mucho más que visitar un taller
Tres son pues, y así lo explican García-Romeu y Blasco, las intenciones de estos «PHestudios» , que van más allá de la típica visita a los talleres de los creadores: «Por un lado, nos interesaba sacar el festival de los espacios más ortodoxos . Asimismo, es fundamental que el público se desplace a otros lugares que no son los habituales del arte. Por eso mismo, no se trata tan sólo de acercarse a los talleres de los artistas, sino también a todos esos ámbitos en los que nace una idea . Y eso puede suceder en una cafetería o un bar, ámbitos en los que el artista se siente cómodo y deja correr su imaginación».
«Nos interesaba sacar el festival de los espacios expositivos más ortodoxos»
El festival en el que se engloban estos noveles «PHestudios» está dedicado este año a la fotografía latinoamericana , y de ahí su título y sus contenidos: Imagen no disponible : «Ese es el mensaje generado automáticamente por el ordenador cuando no reconoce el formato de una imagen, y el que nos aparecería ante la expresión “lo latinoamericano”, cuya imagen, de tan compleja o tan limitada , se multiplica o desaparece ante nuestros ojos, permaneciendo en ambos casos como “no disponible”». Todos los artistas seleccionados que desarrollan ahora esta idea forman parte de colectivos («era algo que teníamos muy claro que así debía ser», cuenta García-Romeu), creadores cercanos a las comisarias, «a los que conocíamos y de los que nos gustaba su forma de proceder».
Desde mañana viernes y hasta el domingo , «PHestudios» propone un itinerario por la ciudad que puede seguirse junto a las comisarias o del que se puede entrar y salir e ir por libre en función de las necesidades y gustos del espectador: «Animamos a reunirse y a hacer pandilla , pero lo importante es interactuar con los artistas, conocer estos lugares y crear tu propia experiencia». Ambos días del fin de semana, el recorrido comienza en C/ Cardenal Mendoza, 3, a las 12 horas. Allí se sitúa el taller de Estudio Mendoza , cuyos miembros se acercan al concepto de «lo latino» desde lo anecdótico, que es desde lo que generalmente generamos juicios de opinión.
El resultado son cinco obras de pequeño formato (una por artista), reunidas en cinco originales cajas creadas por Ana de Fontecha («muy Donald Judd y de apertura curiosa», señalan las comisarias), y que conforman una especie de Estudio Mendoza en miniatura. Mar Cubero se sirve de maderas preciosas provenientes de América para crear sus esculturas; Sergio D. Loeda utiliza como fuente a su hermano y transforma en producto artístico las conversaciones que ambos mantienen por Skype; Miguel Marina parte de las ilustraciones de los libros de Historia infantiles, repletos de silencios; finalmente, Nina Paszkowski colabora junto a Dani Pannullo en sus fotografías.
Así escriben los latinos
A las 13:30, las comisarias nos situarán frente a unos interesantísimos Vendedores de Humo ( Marta Muñoz y Pablo Santacana ). Este dúo proviene del ámbito del diseño gráfico, de forma que lo que veremos en su espacio de trabajo en Ronda de Toledo, 16 serán sus conclusiones después de perseguir por toda la ciudad cierta tipografía asociada a los espacios y comercios de la comunidad latina en Madrid. Un poquito más tarde, a las 14:30 horas, PlayDramaturgia ( Javier Cruz y Fernando Gandasegui ), los autores de la cita «Este cartel traiciona el proyecto» (y que continuaba «No vamos a imprimir un texto más»), nos invitan a manzanilla en La Venecia (C/ Echegaray, 7), y ponen en marcha un proyecto que les ha llevado a reclutar días atrás por toda la ciudad a narradores que ahora protagonizarán las pequeñas acciones que ellos les propondrán. «La fotografía ya es mucho más que una técnica –nos cuentan desde «PHestudios»–. Es una forma de pensamiento. Pensamos en imágenes, y los resultados de nuestros pensamientos no tienen por qué ser fotos. A ello se une que buena parte de nuestro imaginario proviene de lo que nos cuentan, de lo que nos imaginamos . En ese contexto tiene sentido la propuesta a favor de la oralidad y lo narrativo de este colectivo»
«Una buena idea no nace sólo en un taller. También en un bar o una cafetería»
Solo el sábado, Los Hijos ( Javier Fernández Vázquez, Luis López Carrasco y Natalia Marín Sancho ) transforman las «conclusiones vacuas» de las cumbres iberoamericanas en la letra de una cumbia que, de 17 a 19 horas, son la base del karaoke que improvisan en la discoteca Estrella (C/ Enrique Trompeta, 3). En la primera quincena de junio desplegaron su particular Sing Star en el canal televisivo del metro de la ciudad. Por último, tanto el viernes, como el sábado y el domingo, las comisarias invitan a acudir, desde las 18:30 de la tarde, a disfrutar de la pieza sonora de Taco de Raya –el colectivo de Jonás Murias y compañía, que se definien a sí mismos como «más cercanos a la fiesta, las bibliotecas, los líos y el sol que al arte»–, en la casa de uno de sus integrantes en C/ General Álvarez de Castro, número 10. Hay una pelea e importa que pase es un poema, una inscripción lingüística que constata nuestro fracaso.