«Darán que hablar»
Cristina Morales: «Me interesa la moral del juego, contraria a la del aburrimiento»
Aunque joven, es de las escritoras españolas de más calidad de los últimos años. En su última novela, «Malas palabras», pone voz a Santa Teresa. ¿Dudan, acaso, que «Dará que hablar»?
- ¿Cuáles son sus intereses como escritora?
- El principal, aprender a identificar y señalar lo determinante de las cosas, siempre oculto tras motivos accesorios o, directamente, mentiras. Que lo escrito no sea necesariamente bello, pero sí necesariamente desenmascarador.
- ¿Y como lectora?
- Me atrapa la lectura cuando siento que el que escribe está jugando (con las palabras, con la historia o con los lectores) y no canonizando una moral. Me interesa la moral del juego, contraria a la del aburrimiento.
- ¿Sobre qué temas suele escribir?
- Últimamente lo he hecho sobre Santa Teresa de Jesús y su tiempo o sobre mí misma y mi tiempo.
- ¿Dónde ha publicado hasta el momento?
- En Lumen («Malas palabras»), en Caballo de Troya («Los combatientes») y en Cuadernos del Vigía («La merienda de las niñas»). También he sido antologada en Lengua de Trapo, en Salto de Página y en Páginas de Espuma.
- ¿Con cuáles de sus «criaturas» se queda?
- No son criaturas sino monstruos. ¿Con qué monstruo quiere quedarse nadie?
- Supo que se dedicaría a esto desde el momento que…
- Vi un adelanto.
- ¿Cómo se mueve en redes sociales?
- Imagino que se refiere a redes de internet. No me muevo en ninguna.
- ¿Qué perfiles tiene?
- Existe un perfil profesional en Facebook de mi última novela , «Malas palabras», pero no lo manejo yo.
- ¿Cuenta con un blog personal?
- No. Lo más que he hecho en un blog es participar en el de «La tribu de Frida» , donde escribo un diario de una semana.
- ¿Qué otras actividades relacionadas con la literatura practica?
- Soy correctora freelance y he sido lectora en algunas editoriales.
- ¿Forma parte de algún colectivo/asociación/club?
- No.
- ¿En qué está trabajando justamente ahora?
- En la difusión de «Malas palabras» y en estudios de artistas como modelo al natural. Te paso mi tarjeta.
- ¿Cuáles son sus referentes?
- La dramaturga, actriz y artista total Angélica Liddell, tanto en sus textos como en sus espectáculos y en su modo de enfrentarse a la industria teatral. También María Galindo , ensayista anarcofeminista boliviana. Los Sants Estació, joven banda de ranchera-punk de Barcelona. El actor Macello Mastroianni, Luis Buñuel en sus ácidas parodias de la burguesía. Carla García Domènech, autora inédita y enseñante de filosofía en ateneos libertarios de Barcelona. Los cómics de Makoki, los de Makinavaja y la versión televisiva de este último con Pepe Rubianes como protagonista. La revista Cul de Sac. Y Louis-Ferdinand Céline, Antonio Tabucchi, Vladimir Maiakovski, Virginia Woolf, Gonzalo Torrente-Ballester, Tristan Tzara y Agustín García Calvo.
- ¿Y qué otros colegas de generación (o no) destacaría?
- Para mí, los mejores poetas de su generación – que, por muy poco, es también la mía – son Juan Andrés García Román y Erika Martínez. Las novelas de Elvira Navarro y de Lara Moreno no tienen ni una palabra sin tensión. Las últimas dos novelas de Alberto Olmos tienen mucha mala leche, mucho señalamiento del que yo busco, y eso es algo indiscutiblemente bueno. La última novela, pero sobre todo los cuentos, de Juan Gómez Bárcena , son de un preciosismo nuevo para mí. Del mejicano Daniel Saldaña París me quedo con todo todito todo. Y de una quinta lejana a la mía, Marta Sanz, Juan Bonilla, Juan Marsé, Vicente Molina-Foix Y la ensayista Teresa Forcades.
- ¿Qué es lo que aporta de nuevo a un ámbito tan saturado como el literario?
- No creo que el ámbito literario esté saturado porque se escriben muy pocos libros literarios. Hablemos mejor de saturación del mundo editorial, saturación que no deja paso a lo literario. Tampoco creo que la novedad sea un valor literario. Valores literarios son la belleza, la tensión, el nombrar lo hasta ahora no nombrado. No puedo responder mejor a esta pregunta.
- ¿Qué es lo más raro que ha tenido que hacer como escritora para sobrevivir?
- Escribir siempre es una tarea rara, por suerte.
Noticias relacionadas
- Santiago Velázquez: «Me hubiera gustado pertenecer al Club de los Poetas Muertos»
- Carmen Camacho: «Quiero jugármela en cada palabra»
- Juan Tallón: «Escribo para no hacer cosas aún peores»
- Miguel Ángel Ortiz: «Me gusta la idea de madurar al mismo ritmo que mis personajes»
- Víctor del Árbol: «Busco escribir con intención, no limitarme a ser un espejo»
- Valeria Luiselli: «Me gustaría ser como Salinger, pero siempre es tarde para desaparecer»
- Sergio del Molino: «La actividad que siento más afín con la escritura es cocinar»