El cine de la calle desembarca en los Goya con «A cambio de nada»
Dani Guzmán y Miguel Herrán, mejor director novel y actor revelación
A Dani Guzmán no le quedaban lágrimas cuando le dieron el Goya al mejor director novel. Las había gastado todas con el premio a Miguel Herrán , por quien lloró de forma compulsiva. «No sé qué he hecho, no sé qué he dicho, creo que me he extendido más de lo que debía... Me daba igual quedarme en blanco que extenderme, que decir tonterías. Me gusta vivir el momento y después de diez años me he permitido el lujo de no prepararme nada», reconocía en sala de prensa. «Que la Academia haya votado a una película tan personal... Voy a estar en deuda de por vida».
Al igual que sucedió en su momento con Jesús Castro , Miguel Herrán ha encontrado una nueva vida gracias al cine, pero sobre todo gracias a Daniel Guzmán. «Tú lo veías rodando —confesó el actor—, y tenía canas, parecía que tenía 50 años , estaba chupado y pesaba casi 40 kilos. Dani lo ha dado absolutamente todo en esta película. No me salen las palabras. Voy a intentar poner el Goya en mi cuarto pero sé que mi madre me lo va a quitar y lo va poner en el salón para que todo el mundo se sienta orgulloso . Luego lo voy a recuperar y lo voy a meter en mi cuarto».
Herrán ha pasado de ser un chico sin expectativas a querer comerse el mundo: «Si no lo hubiera ganado lo hubiera hecho, pero ahora que lo he ganado voy a por todas ».