Exposición
La mirada de Juan Lacomba sobre la marisma
La Galería Weber-Lutgen presenta hasta el 22 de abril 'Orillas y lindes', en al que el artista sevillano prosigue su investigación sobre el paisaje
El paisaje siempre ha ocupado un lugar de privilegio en la obra de Juan Lacomba (Sevilla, 1954), tanto en su pintura como desde el punto de vista teórico como historiador del Arte, siendo un ejemplo de ello el volumen 'Pintura de Paisaje y 'plein-air' en Andalucía 1800-1936' que editaron la Fundación Focus y la Universidad de Sevilla.
Pero su interés por el paisaje también se manifiesta desde los años 90 en su faceta creativa, ya que, tras realizar un viaje nocturno por el Guadalquivir, Doñana y sus marismas aledañas se convertirían en un eje de su producción pictórica, algo que se dejaría notar en una exposición reciente como 'Al raso', que se pudo ver en la Casa de la Provincia a finales de 2017.
El paisaje de la marisma vuelve a ser el protagonista de la nueva muestra de Juan Lacomba, ganador de premios del prestigio del Focus de artes plásticas en 1995, que puede disfrutarse en la Galería Weber-Lutgen (c/Fray Diego de Cádiz, 9) hasta el próximo 22 de abril.
Esta nueva entrega, que el pintor denomina 'Orillas y lindes', presenta una serie de guaches y relieves que continúan esa investigación en ese territorio nocturno y que sigue los cursos de agua y la fauna que habita en ellos.
Este académico de Santa Insabel de Hungría presenta en su esta muestra guaches y relieves que profundizan en este tema
Como señalan desde esta galería, con el título de 'Orillas y lindes' «se designa una línea real o imaginaría, encontrada en ese territorio al que el artista voluntaria y afectivamente se halla circunscrito. Orillas y lindes que se suponen los restos de una naturaleza residual , zonas secundarias, sin propiedad, y verdaderos linderos que a nadie pertenecen, salvo a los agentes naturales que en ellos actúan. Cobijos de micro fauna y alimañas , de reptiles y anfibios huidizos».
Territorios de la sombra
Así, la nuevas obras de este miembro de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría se detienen, explican desde Weber-Lutgen, en « territorios de la sombra , de álamos en las riberas y de juncias y solitarias carrascas; de almajos, de palmitos y cardos. Seres discretos y a la vez de presencia casi espectral. En las orillas, las arboledas crecen en altura, y las lindes se fugan en una geometría horizontal: entremezcladas con su propia memoria visual se disponen respecto al horizonte, mientras escenifican las puestas de multitud de aves».
Todo un paisaje, añaden, «sabiamente transcrito todo mediante las posibilidades de la pintura y la meditación de la forma, por la densidad del gesto certero y la energía del color».
La exposición se puede visitar en la Galería Weber-Lutgen en horario de mañana los días martes, jueves y viernes, de 11 a 14 horas; y en horario vespertino, de martes a viernes de 17.30 a 20.30 horas.
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