Sevilla

La galería Haurie reabre con la exposición que cerró el Covid-19

La muestra titulada «Personal» de Juan José Gómez de la Torre se inauguró el pasado 12 de marzo

Juan José Gómez de la Torre ante una de sus obras en la galería Haurie ABC

Marta Carrasco

Preparar una exposición es una ardua labor que en ocasiones dura varios años. La galería Haurie de Sevilla tenía previsto casi cerrar temporada con la exposición del pintor, Juan José Gómez de la Torre (Málaga 1959), titulada «Personal».

Todo listo, la obra colgada, y el día 12 de marzo fue la inauguración de la muestra que reunía piezas de los últimos cuatro años de trabajo del artista malagueño. Pero fue debut y despedida. Lo que nadie se podía imaginar es que la exposición estaría sólo abierta al público dos días, porque el día 14 vino el decreto de confinamiento por la pandemia del Covid-19, y la galería se cerró.

Transcurrido el período de fases preceptivo, la galería Haurie ha vuelto a abrir sus puertas, donde el tiempo congelado había preservado la obra recién colgada en la pared, y de nuevo el colorido paisajístico de los cuadros de Gómez de la Torre están a la vista del público.

«Nos cogió el tema de la pandemia, y es una situación que no voy a olvidar en la vida. Estoy bien de salud, pero esta circunstancia me está machacando, como a muchos», dice el artista.

«Personal» presenta obras en óleo sobre tabla o lienzo y una en témpera . Las piezas carecen de discurso, «quieren presentar la realidad de la pintura. Es parte de una labor investigadora y no renuncio a ello, y aunque no está todo, hemos hecho una selección de paisajes».

El pintor trabaja mucho con bocetos, aguadas, carboncillo, haciendo un proceso largo, «algunos cuadros me han costado la misma vida. Con uno de ellos de gran formato he estado varios años, pero a mí me gusta más hablar de la disciplina de la pintura que de tiempo». Para Gómez de la Torre, la creación es una forma de vida , «es una búsqueda constante y no poder dormirme nunca en los laureles».

Durante estos casi tres meses de confinamiento ha seguido trabajando, «aunque estos días condicionan mucho, y es verdad que algunas cosas que he pintado son diferentes debido al estado de ánimo, incluso a veces hay cosas que no me atrevo a mostrar. Este confinamiento me ha dado un sentido más trágico de la vida, y no sé si el Covid-19 me ha cambiado mi forma de pintar, ya veremos . Creo que sí, que me ha influido de una manera, yo diría que a veces más trágica y a veces más libre, son sensaciones extrañas y contradictorias».

Para el pintor, el estado de ánimo es fundamental a la hora de trabajar, «porque no te puedes esconder, te delata, y como no seas honesto en tus principios, eso se nota en tu obra».

Profesor de la Facultad de Bellas Artes de Sevilla esta actividad docente es su complemento, «intento establecer una separación, por respeto sobre todo a mis alumnos, pero tengo la gran suerte de que, como imparto clase de dibujo, siempre está en relación con mi vocación. A veces me preguntan que porqué no pinto figura humana, y les digo que es por respeto a mi trabajo y la labor docente, porque como doy clase de dibujo al natural, si estás toda la mañan corrigiendo, no es sano meterte en el estudio y seguir en lo mismo», afirma.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación