La colección que se anticipó al éxito de reconocidos artistas actuales
El coleccionista Jesús Reina muestra en el Cicus una selección de piezas de Curro González, López Cuenca, Miki Leal y Beuys, entre otros
En la España del Imperio cuando el poder econónmico situaba a nuestro país a la cabeza del mundo, en paralelo también se desarrollaba un coleccionismo privado de arte que durante los siglos XVI y XVII no sólo se fijó en los artistas locales, sino también en los de otros países de Europa. Obras de Velázquez, Goya, Murillo o Zurbarán, antaño en manos privadas, hoy están en los principales museos del mundo.
En la actualidad, la palabra coleccionista de arte se asocia a grandes empresas, bancos o personas de gran poder adquisitivo, algo que esta exposición que presenta el Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (Cicus) quiere en parte desmontar. «Queridos. Colección Jesús Reina » se desarrolla dentro de la programación de Cicus por la difusión de colecciones privadas, cosa que ya hizo con la muestra de los premios de DKV, en 2015; con la titulada «Lo audio-visual. Arte sonoro en las colecciones 9915», en 2016; y; «La necesidad de lo infinito», en 2018, que mostraba la colección de Ernesto Ventós.
«Queridos» reúne alrededor de cincuenta piezas del coleccionista de la Puebla de Cazalla Jesús Reina y presenta obras de varias generaciones de artistas tales como Federico Guzmán, Rogelio López Cuenca, Rafael Agredano, Curro González, Miki Leal, Juan del Junco, Manolo Bautista y Pilar Albarracín , entre otros.
«Yo he comprado siempre lo que me ha gustado, no lo he hecho por inversión, sino por pasión. Esto del coleccionismo es como una adicción , y una vez que empiezas, no puedes parar», dice Jesús Reina, un personaje ligado desde hace años a los ambientes artísticos y de galerías, que tiene amistad y acceso a talleres de artistas y que está en los círculos donde se desarrolla el debate y la creación.
Compra obra de arte desde finales de los años 80. « Conocí a Juana de Aizpuru y luego a Rafael Ortiz que me propusieron empezar una colección pagando poco a poco, porque casi todo lo he pagado a dita». Atesora unas 300 obras y como curiosidad, algunas, como no caben en su casa, las tiene «cedidas» a amigos donde puede ir a «verlas».
Pintura, fotografía, grabados, escultura, dibujos y alguna cerámica componen esta extensa coleción privada, que también incluye algunos autores internacionales como Glen Rubsamen, Fabia Schnoor, Hisae Ikenaga, Hans Lemmen, Joseph Beuys, Jiri G. Dokoupi l... «Recuerdo que lo primero que compré fueron varias serigrafías de Guillermo Pérez Villalta y otras obras de Rogelio López Cuenca ».
Jesús Reina está preocupado por el destino de su colección, aunque ya ha donado algunas de sus piezas al Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC) « y aún donaré algo más, pero me da un poco de miedo pensar en el futuro de la colección y, como aún soy joven, creo, voy a seguir comprando. Esto es como una adicción, y no se para. Yo no lo tengo todo colgado. En mi casa quito y pongo obras , aunque hay algunas que se llevan dos años puestas en la pared hasta que las muevo de nuevo».
Prestador habitual para exposiciones en museos, dice que el coleccionismo en Sevilla no es muy habitual. «No hay muchos, pero yo creo que ahora hay jóvenes interesados en comprar. Yo les diría que viajaran, que lean, que se informen y vean muchas cosas, y que no compren pensando en una inversión, sino por pasión». La muestra podrá verse hasta el próximo 12 de enero.