La Casa de Pilatos inspira el estreno de Rosalind Nashashibi en el CAAC
La artista británico-palestina realiza en Sevilla su primera exposición individual en un museo en España
Rosalind Nashashibi (Croydon, Londres, 1973), es producto del cruce de culturas que tanto se da en países de pasado colonial como el Reino Unido. De madre inglesa, de Irlanda del Norte, y padre de origen palestino, Nashabibi recordaba ayer en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo el español de su abuela sefardí en el antiguo Jerusalen, y a su abuelo, que organizó el servicio de cartería y de distrito de la ciudad santa, hasta que vino el nuevo ordenamiento israelí.
La artista presentó en el CAAC una exposición de media carrera, la primera que realiza en un museo en España. Asistió a la presentación la consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo, quien felicitó a Nashabibi por haber sido seleccionada como artista residente para 2020 de la National Gallery de Londres.
La consejera, quien dijo que su departamento quería darle un impulso al arte contemporáneo y apoyar a los galeristas con las nuevas ayudas, anunció también un programa de adquisición de obras de arte en breve. «La exposición de Nashabibi nos da una ocasión única para acercarnos al mundo creativo de alguien que expresa su desacuerdo con el mundo actual adentrándose en las relaciones humanas. Con su obra consigue que la sociedad reflexione».
Nashashibi examina los modelos de vida, ya sea en una familia en Gaza, donde tuvo que entrar como «periodista» ante la situación de guerra de la zona, para realizar una pieza encargada por el Imperial War Museum de Londres, «incluso tuvimos que salir una semana antes porque no garantizaban nuestra seguridad», dijo. Así como presenta otras piezas inspiradas en la autora de ciencia ficción Ursula K. Le Guin y el oráculo chino.
Pero quizás la sorpresa para el propio director del CAAC y comisario de la muestra, Juan Antonio Álvarez Reyes, han sido las obras realizadas en el propio museo. Nashabibi presenta una serie de obras pictóricas en papel que ha creado inspirada por el salón dorado de la Casa de Pilatos, monumento que visitó al llegar a la ciudad. «Cuando vi la Casa de Pilatos quedé fascinada por la sensación de paz, el color y la luz, sobre todo en un palacio que se construyó en una época histórica llena de oscuridad. Había grandes estatuas y una luz fascinadora, así que me fui a un bazar compré papel de embalar e hice once obras, entre ellas seis de gran formato, que podéis ver aquí. Me siento muy feliz de lo implicada que me he sentido con Sevilla y con el CAAC haciendo obras de arte aquí». Estas piezas se añaden a otras pictóricas que dialogan con su obra fílmica, realizada en 16 mm, en la zona monumental del CAAC. «Amo el cine, pero quería volver a tener una relación más directa con el arte y por eso he vuelto a la pintura».
Por su parte, Juan Antonio Alvarez Reyes recordó que la Cartuja, sede del CAAC, alberga el sepulcro de los ancestros de los Medinaceli, «es algo así como cerrar el círculo. Le invitamos a trabajar aquí en el CAAC y estamos felices, además de su con trabajo fílmico, por el pictórico, dada la tradición que la pintura tiene y sigue teniendo en la ciudad de Sevilla». Señaló que en los trabajos fílmicos más antiguos realizados en Palestina, «son importantes los lugares y las personas» , y destacó la necesidad de analizar la constitución política del presente, «algo que está en los trabajos de Rosalind».
Nashashibi, licenciada en Pintura por la Universidad de Sheffield , es Máster en Bellas Artes por la Glasgow School of Art. Fue nominada en 2017 al prestigioso premio Turner y la primera mujer en recibir el premio Beck's Future en 2003. Ha realizado exposiciones en la Tate Britain, Imperial War Museum, Secession de Viena, entre otros museos, y participado en la documenta14 y la Bienal de Venecia. Su obra forma parte de colecciones como el Moma de Nueva York.