Rafael Moneo
Compromiso ético con nuestro país
De la aguda inteligencia e inmensa curiosidad intelectual de Antonio Bonet Correa son prueba sus libros y publicaciones
De la generosidad con la que Antonio Bonet Correa compartió sus conocimientos de la Historia del Arte con sus alumnos da razón el hecho de que toda una pléyade de ellos esté hoy al frente de departamentos universitarios, museos, bibliotecas, fundaciones… De su aguda inteligencia e inmensa curiosidad intelectual son prueba sus libros y publicaciones, ya que sería difícil encontrar un rincón, sea de la geografía de la Península Ibérica o sea de la historia de la estética, a los que no haya prestado atención. De la seriedad de su compromiso ético con nuestro país, da testimonio su continua disposición a contribuir a la vida de las instituciones, siendo tal vez la Academia de Bellas Artes de San Fernando aquella que ha tenido la fortuna de disfrutar más tiempo de su buen sentido, experiencia y cordial talante.
Vida completa y plena, Antonio Bonet Correa disfrutó de todo aquello que de este mundo cabe esperar, tanto en el ámbito de la familia y la amistad como en el de la academia y las instituciones.
Con profunda tristeza decimos adiós a Antonio Bonet Correa, pero también pensando que no hay mejor modo de vivir que como él lo hizo: entregado a enseñar a los demás todo lo que él sabía acerca de los secretos de la obra de arte. Secretos que nos hacen pensar que tal vez tiene sentido todavía el hablar de belleza.