Muere Pinin Brambilla, la restauradora que salvó «La última cena» de Leonardo

La italiana, que ha fallecido a los 95 años, restauró algunas de las obras maestras del arte italiano, como las pinturas de Giotto en la Capilla de los Scrovegni en Padua o los frescos de Masolino da Panicale en el Baptisterio de Castiglione Olona

La restauradora italiana Pinin Brambilla MIKEL PONCE

Ángel Gómez Fuentes

Era conocida en el mundo del arte por haber salvado «La última cena» de Leonardo da Vinci , una de las pinturas más famosas del mundo. Pinin (diminutivo de Giuseppina) Brambilla Barcilon, una de las más importantes restauradoras del siglo XX, murió el sábado en Milán, a los 95 años.

Pinin Brambilla dedicó 21 años, entre 1978 y 1979, a la restauración de la obra maestra que el genio del Renacimiento pintó entre 1594 y 1598. La enorme pintura mural, de 4,60 metros de altura y 8,80 metros de ancho, se conserva en su ubicación original: en la pared del antiguo convento dominico de la Iglesia de Santa Santa Maria delle Grazie, en Milán.

«La última cena» sobrevivió milagrosamente al bombardeo de Milán en 1943. En esta obra, Leonardo abandonó el método tradicional utilizado en la época, la pintura al fresco. Pintó la escena, conocida también como «El cenáculo», al seco, con témpera y óleo, sobre una preparación de yeso. Desconocía Leonardo que debajo del Baptisterio pasaba un río que humedecía la pared y absorbía la pintura.

«La última cena» de Leonardo da Vinci ABC

Cuando se hizo cargo de su restauración, Brambilla encontró una obra en pésimo estado, con un color desfigurado por restauraciones del pasado poco afortunadas. Para Pinin Brambilla fue el trabajo de una vida. Milímetro a milímetro, con disolventes y papel japonés, logró reconstruir el color original limpiando las impurezas acumuladas y las colas de restauraciones anteriores. Brambilla se sentía tan ligada a Leonardo que solía decir: «Después de tantos años, para mí es de la familia; nos tratamos de tú». Para contar su legendaria aventura, escribió el libro «Mi vida con Leonardo» (2015).

Brambilla restauró también algunas de las obras más importantes del arte italiano. Entre ellas, las pinturas de Giotto en la Capilla de los Scrovegni en Padua, los frescos de Masolino da Panicale en el Baptisterio de Castiglione Olona, los frescos medievales en Oleggio y los frescos del siglo XV en el Palazzo Borromeo en Milán. También restauró obras de Piero della Francesca, Mantegna, Caravaggio, Tiziano, Tiepolo, así como de numerosos artistas de arte moderno y contemporáneo.

Fue consultora para restauraciones en varios museos extranjeros, entre ellos el Louvre y el Museo Nacional de Arte de Cataluña. En 2005 fundó el Centro de Conservación y Restauración La Venaria Reale , referente para la formación universitaria de restauradores y para la investigación avanzada en el sector del patrimonio cultural. Este centro dio la noticia de su muerte, destacando que «su rigor y ejemplo seguirán siendo un punto de referencia para todo el mundo de la restauración».

Como a veces suele ocurrir en el mundo del arte con restauraciones muy delicadas, como fue el caso de «La última cena», el trabajo de Pinin Brambilla no estuvo exento de alguna crítica, que ella rechazó: «Es la restauración del siglo y lo que hice no lo realicé yo sola. El trabajo fue seguido paso a paso por todas las comisiones competentes».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación