María Dolores Jiménez-Blanco, nueva directora general de Bellas Artes
Es directora del Departamento de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid y patrona del Museo del Prado
![María Dolores Jiménez-Blanco](https://s1.abcstatics.com/media/cultura/2020/09/22/lola-k9TD--1248x698@abc.jpg)
Ya sonó su nombre como posible directora del Prado , tras la espantá de Miguel Zugaza. Pero finalmente fue otro Miguel (Falomir) el elegido, pese a que, según dicen, ella era el «caballo ganador» de José Pedro Pérez-Llorca. María Dolores Jiménez-Blanco Carrillo de Albornoz conoce bien el museo, pues no en vano es vocal de su Patronato desde 2013 y participó en la primera guía oficial de la pinacoteca en 2008. El pasado domingo colaboraba con ABC en estas mismas páginas en un debate sobre las mujeres y el Prado. Unos días después, volvemos a hablar con ella: esta vez para felicitarla por su nombramiento como nueva directora general de Bellas Artes , en sustitución de Ramón Fernández-Baca, que fue la apuesta de José Guirao, el anterior titular de Cultura.
Hoy aprobaba su nombramiento el Consejo de Ministros y no se había publicado aún en el BOE, por lo que prefería no pronunciarse todavía sobre los retos que le esperan, que no son pocos, en el seno de un Ministerio que está, día sí y día también, en el punto de mira. Por citar solo unos cuantos miuras que le esperan en el burladero , las tan ansiadas y esperadas leyes de Patrimonio y de Mecenazgo , la negociación de la Colección Carmen Thyssen (cuya última prórroga expira el próximo día 30) o la gravísima crisis económica que asola a nuestros museos (y que necesitan como agua de mayo un presupuesto más que generoso), por no hablar de los fuegos que tendrá que apagar en su propia casa: la complicada bicefalia de la subdirección general y los desencuentros del ministro con el mundo del arte, que le dedicó durísimos comunicados por su ninguneo hacia el sector.
Pero esta granadina, nacida en 1959 , no hace honor al, digamos, difícil carácter de sus paisanos y sí hace gala de una gran afabilidad. Pero, sobre todo, conoce muy bien el mundo del arte, desde dos perspectivas: la universitaria y la museística , que ha compaginado a lo largo de toda su carrera. Tendrá que dejar, de momento, la docencia. Doctora en Historia del Arte por la Universidad Complutense de Madrid y Master of Art History and Museum Training en la George Washington University de Washington DC, desde 2018 es directora del Departamento de Historia del Arte de la Complutense. Entre 2002 y 2006 ejerció la docencia en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, en 2014 fue profesora invitada en la Universidad Tres de Febrero de Buenos Aires y en 2017 es elegida profesora de Culturas y Civilizaciones en el Centro Rey Juan Carlos I de la Universidad de Nueva York.
En cuanto a los museos y centros de arte, además de la ya citada vinculación al Prado, ha colaborado con instituciones internacionales de prestigio como la Phillips Collection de Washington o el Museo Guggenheim de Nueva York. Además, ha ejercido como comisaria en exposiciones para el Museo Reina Sofía («Campo Cerrado» o «Arte y Poder en la posguerra española, 1939-1953»), la Fundación Mapfre, la Fundación Juan March y la Fundación César Manrique de Lanzarote, entre otros centros. También ha colaborado en el suplemento cultural del diario «La Vanguardia».
Entre sus publicaciones destacan «Spanish Art in New York» (Asociación de Amigos de la Hispanic Society y El Viso), «Buscadores de belleza» (Ariel) -una historia de los grandes coleccionistas de arte-, ambos libros escritos junto con Cindy Mack; y una edición crítica de «Juan Gris. Correspondencia y escritos» (Acantilado).