El Salón del Cómic de Barcelona se pasea por los Siete Reinos de Poniente
La cita centra su XXXIII edición en la ciencia ficción y la fantasía heroica
No es un número redondo ni un aniversario señalado, pero para el Salón del Cómic de Barcelona cada edición es especial y, sobre todo, un poco más grande y elaborada que la anterior. Ocurrió con el año de los samuraís, con el de los robots y también con el de la deslumbrante exposición bélica, y ocurrirá otra vez a partir del próximo jueves, 16, cuando la cita barcelonesa llegue a su XXXIII edición con 36.000 metros cuadrados al servicio de la viñeta, cerca de una veintena de exposiciones y la firme convicción de que, además de puerta de entrada a la lectura, el cómic ha de ser también «pasillo, sala de estar y comedor».
He aquí, pues, el noveno arte convertido en «pilar fundamental» de la industrial editorial y agrupado en esta ocasión entorno a la ciencia ficción y la fantasía heroica, eje temático que protagonizará la gran exposición del salón. Una muestra que reúne cerca de 400 originales de series como «Flash Gordon», «Star Wars», «Dreadstar», «Conan», «Predator» o «Aliens» para abordar aspectos como la conquista del espacio, las distopías y ucronías, la adaptación de leyendas y los resultados del apocalipsis atómico.
Un viaje a través de la fantasía animada que contará también con elementos de atrezzo diseñados por DTT, estudio de efectos especiales responsable de «El laberinto del fauno», dioramas de «Star Wars» y una serie de charlas centradas en la divulgación científica y que prestará especial atención al fenómeno «Juego de tronos». Así, además de exhibir los diseños originales de Enrique Corominas, autor de las portadas de las ediciones en castellano de los libros, el Salón dedicará un apartado a la adaptación al cómic de la obra de George R. R. Martin y abordará la dimensión política de la saga con una conferencia a cargo de Tania Sánchez, coautora del libro colectivo «Ganar o morir. Lecciones políticas en Juego de Tronos».
Con todo, la fantasía no es más que la guinda de un certamen que celebra el inminente estreno de la película «Anacleto, agente secreto» exhibiendo una veintena de originales de Vázquez, reivindica el papel de autoras de cómic femenino como Pili Blasco, María Pascual o Rosa Galcerán durante el franquismo, y saca brillo a su galería de superhéroes y villanos con sendas muestras dedicadas al Capitán América y a los 75 años del Joker, el archienemigo de Batman. Quien también cumple 75 años es «The Spirit», el justiciero enmascarado que Will Eisner ideó en 1940 y que da pie a una exposición con originales de Eisner y de algunos de los autores españoles que han trabajado con el personaje. También el humor estará más presente que nunca gracias a una retrospectiva dedicada a Jaume Perich, mordaz cronista de la realidad de cuya muerte se cumplen veinte años, y a la recuperación del galardón que se instituyó en su memoria en 1996.
La relación cada vez estrecha con el mundo del cine y el audiovisual –«de las diez películas más taquilleras de la historia cuatro están basadas en cómics», recordó el director del Salón, Carles Santamaría-, el proceso creativo de Paco Roca a la hora de realizar la premiada «Los surcos del azar» y la presencia de autores de primera como Milo Manara, David Finch, Hub, José Luis García López, Scott McCloud o Igort, entre muchos otros, son algunos de los atractivos añadidos de una cita que espera superar los 106.000 visitantes que pasaron por Fira de Barcelona el año pasado.
Un entusiasmo que, sin embargo, contrasta con el enésimo jarro de agua fría sobre el proyecto del Museo del Cómic, impulsado en 2010 y paralizado tras una primera fase de rehabilitación del edificio que debía acogerlo en Badalona. «Necesitamos entre siete y nueve millones de euros que ahora mismo no tenemos», reconoció el conseller de Cultura, Ferran Mascarell, quien sí que anunció que en las próximas semanas se presentará lo que podrían ser las bases de la colección del hipotético museo. Otra cosa, añadió, es saber qué ocurrirá con el espacio. «Tenemos que hacerlo nacer en buenas condiciones para que sea sostenible», añadió.
Noticias relacionadas