Basilea revela su pasión por el arte en el Reina Sofía por partida doble

El Kunstmuseum cede 166 obras maestras al museo español de forma gratuita. La Reina Doña Letizia inaugura hoy estas dos exposiciones irrepetibles

Basilea revela su pasión por el arte en el Reina Sofía por partida doble JOAQUÍN CORTÉS/ROMÁN LORES. Museo reina sofía

NATIVIDAD PULIDO

El caso de Basilea es único en la Historia del Arte y un ejemplo a seguir. Cuenta con uno de los primeros museos públicos del mundo, el Kunstmuseum , cuya colección está formada por muchas colecciones. Ya desde el siglo XVI la ciudad suiza presumía de bibliotecas y gabinetes de arte y curiosidades y en 1662 abrió al público la colección de la ciudad de Basilea con unos fondos entre los que se encontraban el legado de Erasmo de Rotterdam y algunos Holbein.

Hoy es considerado uno de los grandes museos internacionales, gracias a importantes coleccionistas que han ido donando sus obras, a los sucesivos directores del museo, que no pasaron por alto las ocasiones que se presentaban de adquirir buenas piezas a buenos precios –algunos incluso con dinero de su propio bolsillo–; a mecenas que permitían hacer esas compras, e incluso a los ciudadanos de Basilea, capaces de llevar a cabo un referéndum para lograr que unas obras de arte no salieran del país. La pasión por el arte está en el ADN de esta ciudad humanista donde arte y educación son inseparables.

Cierre por reforma y ampliación

El Kunstmuseum ha acometido una reforma y ampliación de sus instalaciones y sus responsables han cedido, gratuitamente, a España 176 obras maestras . De ellas, 166 se hallan en el Reina Sofía –tan solo doce se habían visto en alguna ocasión en España–, distribuidas en dos exposiciones, que hoy inaugurará la Reina Doña Letizia y que han contado con el apoyo de la Comunidad de Madrid y la Fundación Abertis. Por un lado, la sala A1 del edificio Sabatini reúne 104 piezas de la colección moderna del museo suizo bajo el título «Fuego blanco» (tomado de un lienzo de Barnett Newman, presente en la muestra).

Constituye un brillante recorrido por las principales vanguardias europeas y por el gran arte norteamericano de la segunda mitad del siglo XX: cubismo, simbolismo, la Bauhaus, surrealismo, abstracción, constructivismo, minimalismo, postexpresionismo, expresionismo abstracto, pop art... Y todo ello, a través de los grandes nombres de cada movimiento. La nómina es interminable: Picasso, Gris, Braque, Munch, Leger, Kandinsky, Le Corbusier, Giacometti, Arp, Ernst, Klee, Mondrian, Richter, Rothko, Jasper Johns, Warhol... Da buena cuenta de lo excepcional de los préstamos la garantía del Estado, que se ha hecho cargo de casi la totalidad de los seguros, y que asciende, sumando las exposiciones del Prado y el Reina Sofía, a más de 1.587 millones de euros.

Del cubismo a Giacometti

Reciben al visitante una obra de Böcklin y otra de Hodler, dos de los artistas mejor representados en el Kunstmuseum de Basilea. Entre los puntos fuertes de esta colección figura el cubismo, con grandes piezas de su santísima trinidad (Picasso, Braque, Gris), donadas por Raoul La Roche; el «arte degenerado» perseguido por los nazis –el parlamento regional concedió un crédito especial para adquirir 21 obras en una subasta en Lucerna en 1939–, con obras de Klee, Kirchner, Nolde, Munch, Beckmann...; la abstracción, representada de manera fulgurante gracias a la donación realizada por Marguerite Arp: junto a las obras de su marido, Hans Arp, otras de Kandinsky, Mondrian... Giacometti constituye otro de los núcleos del Kunstmuseum de Basilea: atesora una cuarta parte de los fondos de la Fundación Giacometti. Junto a espléndidas esculturas del artista suizo cuelgan obras surrealistas de Ernst, Tanguy, Masson...

También fue un visionario el Kunstmuseum en cuanto al arte norteamericano. En 1959 recibió 100.000 francos suizos de la Compañía Nacional de Seguros, que empleó en comenzar a gestar esta colección, cuando sus precios no eran aún prohibitivos. Han viajado a Madrid destacadas piezas como «Nº 1», un cuadro negro de Rothko; el ya citado «Fuego blanco», de Barnett Newman; cuadros de Jasper Johns, Warhol... La muestra se completa con destacadas piezas minimal (Dan Flavin, Donald Judd, Carl André), fotografías de Fischli y Weiss, vídeos de Pierre Huyghe y Steve McQueen...

Manuel Borja-Villel, director del Museo Reina Sofía, y comisario de esta exposición junto a Bernhard Mendes Bürgi y Nina Zimmer, director y subdirectora del Kunstmuseum de Basilea, subraya la importancia de esta colección, «que hemos admirado todos. Es una colección de colecciones, que no cuenta una historia “totalizante” y universal, sino que cuenta muchas historias de relaciones entre artistas y coleccionistas, conservadores y directores de museos, que tienen pluralidad de lecturas». A comienzos de julio se incorporará a la muestra «Nafea Faa Ipoipo (¿Cuándo te casarás?)», de Gauguin, adquirido por la Autoridad de Museos de Qatar por 300 millones de dólares y que se exhibe en estos momentos en la Fundación Beyeler de Basilea.

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