El grafiti que salta del muro

El grafiti traspasa la pared e impacta al espectador con su apariencia tridimensional. Es lo que consigue el artista portugués Odeith con sus creaciones de gran formato, que pueden verse en las calles de Lisboa. [visita aquí la galería con sus mejores obras]

Su técnica es tan especial que logra ese efecto jugando con la perspectiva y con la anamorfosis, ya investigada a lo largo de la historia, como demostró Piero della Francesca y pudo comprobarse posteriormente a través del Cinemascope en la gran pantalla

Resulta muy difícil pasar de largo ante los murales de Sérgio Odeith sin detenerse, pues su contemplación desemboca en una sorpresa mayúscula. Dos paredes y el suelo es todo lo que necesita este joven «cronista de la libertad», tal cual se define.

La imagen parece salirse de los ladrillos y asaltar al visitante, según documenta igualmente un libro que recopila sus trabajos de los últimos tres años.

Se hacen eco de su peculiar técnica todas las webs internacionales punteras en este tipo de arte: «Bored Panda», «Demilked», «From Up to North», «Fubiz» o «Laughing Squid». Sin duda, porque su labor no sólo puede rastrearse en Lisboa, sino en Londres, Dubái, Nueva Orleans o Abu Dabi.

Odeith se erige en el espejo de la explosión de arte urbano que vive la capital portuguesa, donde destaca igualmente VHILS, sobrenombre de Alexandre Farto, con una exposición en el mismísimo Teatro Nacional Doña María II y amigo del mismísimo Banksy.

El grafiti en Lisboa, ligado a la irrupción de bandas de rap como Da Weasel o Bling Projekt, alcanza tal dimensión que acaba de inaugurarse una ruta turística para ver los mejores murales de la ciudad. El proyecto Public Art Tours lo inauguró el colectivo Underdogs el pasado 14 de marzo. Dura tres horas y transcurre por Jardim do Tabaco, Alcántara o Casi do Sodré.