La SGAE calla frente al fracaso de la Asamblea
Los socios de la entidad rechazaron los estatutos, las cuentas y la gestión de la actual presidencia
![Imagen de la Asamblea General de la SGAE con el rechazo a la gestión](https://s2.abcstatics.com/media/cultura/2018/06/22/sgae-k2kH--940x705@abc.jpg)
Silencio sepulcral en la Sociedad General de Autores (SGAE) después del fracaso de su Asamblea General , que el jueves rechazó las cuentas, la gestión y los nuevos estatutos propuestos por su actual presidente, José Miguel Fernández Sastrón . «Hablaremos el lunes, hoy no», señalan fuentes de la presidencia de la entidad. «Los resultados son muy contundentes, pero esperaremos a ver qué hace el presidente», explica Julia Altares , vicepresidenta del Colegio de Obras Audiovisuales de la sociedad y una de las principales opositoras a Sastrón.
En efecto, los resultados de de la votación fueron sorprendentes. Primero, por la participación, que triplicó a la del último lustro: más de 26.000 socios intervinieron con su voto en una jornada crucial para la entidad. Y segundo, y más importante, por el rechazo total a la actual deriva de la institución. Ni las cuentas de 2017, que fueron rechazadas por el 56,91% de los votos, ni la gestión de ese mismo curso, a la que se opuso el 61,72% de la participación, salieron adelante. Pero el punto más candente era la renovación de unos estatutos cargados de polémica , que según las voces críticas buscaban perpetuar en el cargo a Sastrón. Y estos también fueron rechazados con la mayor oposición: un 66,61%.
«Este rechazo de los estatutos lo ha provocado Sastrón. Tenía en su mano haber hablado y haber consensuado… así los hubiera sacado», opina Altares, que no esconde cierta sorpresa ante el gran rechazo de la Asamblea. «El problema de la gestión es que ha sido personalista, sin consenso, autoritaria por parte de Sastrón», añade.
Según comenta, uno de los grandes condicionantes de la velada del jueves (la Asamblea empezó a las cuatro y media de la tarde y terminó cerca de las diez de la noche) fue la incidencia del voto electrónico . «Nos costó dos años llevarlo adelante con la oposición de Sastrón», recuerda Altares, que sostiene que el presidente no debería seguir en el cargo por una cuestión «de dignidad y de decencia». De hecho ya están planeando una moción de censura: «Nos abocamos a unas elecciones y nos gustaría que el proceso electoral que no estuviera bajo su paraguas».
Desde el Ministerio de Cultura y Deporte, que hace unos días envió un requerimiento a la SGAE solicitando información sobre la última auditoría realizada a la entidad y también un informe de las medidas «anti rueda» que iban a tomar, tampoco quieren pronunciarse sobre la votación. Aunque eso sí, confirman que la SGAE respondió al requerimiento: un día tarde y por correo electrónico.