«Nadar en la ambulancia», «los preservativos de la boda»... ¿Cuál es el mejor lapsus linguístico?
La Fundeu organizó hace unos días un mundial de lapsus para determinar cuál era la mejor expresión fallida de nuestra lengua
Decía Freud que los «lapsus linguae» eran malas jugadas del inconsciente, una forma traviesa de lo reprimido de salir a la luz. Más recientemente, los psicólogos Motley y Baars han defendido que los lapsus se producen en ambientes de tensión, distracción o estrés, aunque sigue en debate la razón última por la que se producen, y si responden a algún deseo oculto o no. La certeza la expresa muy bien el refranero popular: «Quien tiene boca se equivoca».
Estos errores han provocado situaciones disparatadas y humorísticas que ya forman parte del imaginario colectivo español: desde José Luis Rodríguez Zapatero declarando que el motivo de estrechar las relaciones entre Rusia y España era para «estimular, favorecer» y «para follar», hasta Mariano Rajoy afirmando que «ETA es una gran nación», entre muchísimos otros.
Hace unos días, la Fundación del Español Urgente (Fundeu) recopiló algunos de los lapsus más descacharrantes de nuestra lengua, escuchados aquí y allá, ayer y hoy, y organizó un Mundial de Lasus en redes sociales para determinar cuál era el mejor. Entre ellos: «nadar en la ambulancia», «los preservativos de la boda», «la antena diabólica» o la «circuncisión electoral».
El ganador final de esta insólita competición, por aclamación popular, ha sido «luz genital» (en lugar de cenital), que se ha impuesto en la final del mundial al no menos ingenioso «cólico frenético» (por nefrítico).
¡Ya tenemos ganador del #MundialDeLapsus!
— Fundéu BBVA (@Fundeu) May 25, 2020
La luz «genital» 🥇se ha impuesto en la final a otro clásico: el cólico «frenético»🥈 .
En el #blogFundéu puedes ver todos los candidatos y averiguar por qué el ganador es lo que se llama una «piquiponada».https://t.co/lXh9J15MqT pic.twitter.com/rNx3N1mYTJ
En el blog de Fundeu cuentan, además, el origen de esa «luz genital» que ha encandilado a los usuarios de Twitter, que no es otro que una declaración de Juan Pich y Pon, alcalde de Barcelona en los años treinta. Se cuenta quela frase con la que alumbró (nunca mejor dicho) tal descubrimiento lingüístico fue esta: «En la Rambla de Catalunya han abierto un restaurante con luz genital». También se le atribuyen otros hallazgos de altura como la «calígula veraniega» (en lugar de canícula).