Iceta pide declarar BIP la casa de Aleixandre 22 días después de que lo hiciera el equipo de Uribes
La Comunidad de Madrid ya inició hace dos semanas los trabajos de procedimiento para incoar el expediente

La Comunidad de Madrid ha recibido con 22 días de diferencia la misma petición por parte del Ministerio de Cultura: declarar Bien de Interés Patrimonial la casa de Vicente Aleixandre , situada en la antigua calle Velintonia 3. El contenido de ambas misivas coincide, un informe de la Dirección General de Bellas Artes que justifica otorgarle el segundo nivel de protección en materia de patrimonio histórico al lugar donde vivió el premio Nobel, hoy en estado de prerruina. Los remitentes, eso sí, son distintos.
Si la primera carta la firmaba la directora general de Bellas Artes, Lola Jiménez Blanco , en nombre del Ministerio que dirigía José Manuel Rodríguez Uribes , la segunda lleva la estampa de Miquel Iceta , que tomó posesión de su cargo el día 12 de julio, justo dos días antes de que la Consejería de Cultura madrileña respondiera a la primera petición, la cursada por Jiménez Blanco el día 6 de julio.
En dicha carta la Comunidad informaba de su decisión de «emprender los trabajos de preparación de procedimiento de declaración de la casa de Vicente Aleixandre como Bien de Interés Patrimonial, cuya incoación se prevé para finales de año». Queda claro que en el traspaso de carteras a alguien se le ha olvidado informar a Iceta, a quien la hiperactividad en sus primeros días en Cultura le ha jugado su primera mala pasada como ministro.
Para aclarar este lío de fechas conviene recordar que una de las aspiraciones del exministro Uribes era aplicarle a la casa se convirtió en el centro de reunión de los amigos del poeta la máxima protección recogida en la ley de patrimonio: Bien de Interés Cultural (BIC). La figura del BIC se reserva para aquellos bienes que tienen un valor excepcional por su importancia artística, patrimonial o arquitectónica, algo que, a juicio de la Comunidad de Madrid, no acredita la casa de Velintonia 3.
La Consejería que ahora dirige Marta Rivera de la Cruz ha realizado en varias ocasiones estudios técnicos para atender a la petición de Uribes, que el pasado mes de febrero irritó a la consejera regional visitando el inmueble, pero en ninguno de esos informes se podía acreditar que reuniera los requisitos necesarios. Entre otras razones, por la falta de contenido mueble y documental de la casa.
Precio prohibitivo
Anteriores ministros socialistas ya descartaron aplicarle la categoría de BIC a Velintonia 3, entre ellos Carmen Calvo , que en su día llegó a calificar de «desorbitada, impagable e injustificada» los 6,5 millones que la familia de Aleixandre pedía para la venta de la casa y poder restaurarla para darle un uso adecuado. El viejo deseo de la Asociación de Amigos de Vicente Aleixandre es que este inmueble se convierta en la 'Casa de la Poesía'. Pero la familia sigue pidiendo casi seis millones por ella y para restaurarla habría que invertir al menos otro millón y medio de euros.
Cuando Uribes por fin se dio por vencido en su intención de declarar BIC Velintonia 3, dio luz verde a activar la vía del BIP, que según la ley regional se puede aplicar a aquellos bienes que «formando parte del patrimonio histórico de la Comunidad de Madrid, sin tener valor excepcional, posean una especial significación histórica o artística y en tal sentido sean declarados».
A juicio de la Dirección General de Bellas Artes, esta figura encaja para la casa de Vicente Aleixandre, aunque, como advierten desde la Comunidad de Madrid, el BIP no puede impedir que se hagan modificaciones sustanciales al inmueble. En el informe que acompañó a la carta remitida a la Consejería por Jiménez Blanco el 6 de julio, se subraya que «hacia 1935 frecuentaron la casa madrileña figuras tan esenciales como Rafael Alberti, Federico García Lorca, Luis Cernuda, Pablo Neruda, Dámaso Alonso, Gerardo Diego, Manuel Altolaguirre, Miguel Hernández o José Antonio Muñoz Rojas , entre otros, convirtiéndose esta en escenario de deslumbrantes conversaciones y debates culturales».
Germen del Nobel
Según el informe que envió el equipo de Uribes y que Iceta ha vuelto a enviar el 28 de julio, 22 días después, en la España de la posguerra la casa se convirtió «en una suerte de santuario cultural del 'exilio interior'» y se subraya «la importancia de un foco cultural de este calibre en un contexto socio-político muy poco proclive al estímulo artístico».
El punto de encuentro adquirió aún más valor cuando en 1977 Aleixandre ganó el Nobel, porque, según Bellas Artes, «a aquello Aleixandre y sus compañeros artísticos habían contribuido desde la vivienda de Velintonia». Por todos estos motivos, se la considera merecedora de una protección cualificada, «del mismo modo que se dispensa a otras casas de creadores como Lope de Vega».
Tras analizar el informe, la Consejería informó el día 14 de julio de su voluntad de iniciar el procedimiento de declaración de la casa de Vicente Aleixandre como BIP, «cuya incoación se prevé para finales de año». De este modo, Rivera de la Cruz espera otorgarle la «protección adecuada al inmueble» y espera avanzar junto al Estado y el Ayuntamiento en una solución satisfactoria para el conjunto de necesidades de la casa del poeta.
Lo sorprendente ha sido que dos semanas después Iceta ha vuelto a remitir el mismo informe en una carta en la que recuerda la «situación de abandono» en la que se encuentra la casa y urge a la Comunidad a declararla BIP. «Te propongo que des las indicaciones oportunas para incoar el expediente para la declaración de casa de Vicente Aleixandre como Bien de Interés Patrimonial», señala Iceta, quien concluye la misiva con la propuesta de convertir Velintonia 3 en la 'Casa de la Poesía'.
Desde la Comunidad recuerdan que ya hay una casa de la poesía: la Fundación José Hierro , en Getafe. Sí que ven en cambio útil usar Velintonia 3 como un centro de estudios del premio Nobel, una vez que puedan hacerse con el archivo de Aleixandre. Otras de las alternativas que manejan desde el Gobierno regional es, en colaboración con Estado y Ayuntamiento, llegar a un acuerdo con la familia del poeta para que cedan el inmueble de manera gratuita y las administraciones públicas se hagan cargo de las labores de restauración.