historia

Iósif Stalin, el seminarista que fue «Zar» del «Imperio Rojo»

Hijo de un zapatero georgiano, a los quince años ingresó con una beca en el seminario ortodoxo de Tbilisi

Iósif Stalin, el seminarista que fue «Zar» del «Imperio Rojo» abc

Antonio Muñiz

Iósif Vissariónovich Dzhugashvili entró en el seminario ortodoxo de Tbilisi (Georgia) con quince de años edad. El joven era un brillante estudiante de teología al que le habían concedido una beca. Su padre, Vissarion Dzhugashvili, era un humilde zapatero que había participado en la rebelión campesina de Ananuri, aplastada por las tropas imperiales. El joven Iósif creció rodeado por la violencia. Su padre solía golpearles a él y a su madre, una circunstancia que explica el carácter manipulador e intrigante del que más tarde sería Iósif Stalin , uno de los dictadores más sanguinarios de la historia.

Fue expulsado del seminario por repartir propaganda del Partido Socialista georgiano en mayo de 1899. Fue entonces cuando Iósif entra a formar parte de las filas revolucionarias, destacando por su carácter frio, rígido y calculador que aparentaba una total ausencia de emociones y un marcado desprecio a los afectos. Desprecio que mostró claramente durante la II Guerra Mundial cuando se negó a intercambiar a su hijo mayor, Yákov , por el Mariscal Von Paulus , comandante del sexto Ejército alemán eliminado en Stalingrado. «No cambió mariscales por soldados», afirmó ante la propuesta.

En agosto de 1900 había entrado en contacto con Víktor Kurnativsk , un enviado de Vladímir Ilich Uliánov, Lenin, a la Tbilisi zarista con el objetivo de expandir un periódico subversivo y reorganizar el partido. Fue también el momento en que entró en contacto con los escritos de Lenin. Poco después, Iósif Vissariónovich Dzhugashvili pasaría a la clandestinidad como miembro del comité del Partido Obrero Socialdemócrata de Rusia en las ciudades de Georgia. Ya en diciembre de 1905, Stalin conoció personalmente a Lenin y se adhirió a la doctrina bolchevique de un partido fuerte formado por revolucionarios profesionales. En 1907 Stalin asistió al V Congreso del Partido Obrero Socialdemócrata de Rusia en Londres, que consolidó el liderazgo de la fracción bolchevique de Lenin y en donde se debatió la estrategia para la revolución comunista en Rusia.

El ascenso al poder

Después de participar en el V Congreso Stalin inició su rápido ascenso al poder, primero del partido y, tras la revolución, del nuevo estado soviético. En 1912 tuvo el primer encargo de relevancia que le concedió Lenin . Tras regresar del exilio, se traslado a San Petersburgo y participó en la fundación del diario Pravda , el principal órgano mediático del Partido Bolchevique. Un elemento esencial en la propaganda ideológica comunista. En aquel entonces, Iósif Dzhugashvili adoptó el apellido «Stalin», que luego utilizaría en sus publicaciones, supuestamente porque proviene de la palabra rusa «acero».

Stalin continuó ganándose las simpatías de Lenin con la redacción de un artículo titulado «El marxismo y la cuestión nacional» , un escrito que influyo en su posterior nombramiento como Comisario del Pueblo para Asuntos Nacionales. El ascenso político prosiguió a la sombra de un Lenin que favorecía al «georgiano maravilloso» que se adaptaba a la voluntad del líder bolchevique. Al estallar en 1917 la llamada «revolución de febrero», Stalin recibió el encargo de asumir la dirección del diario Pravda. Más tarde, y a la espera de la llegada de Lenin , Stalin se hace con la dirección del partido en San Petersburgo, capital de la Rusia Zarista. Más tarde sería nombrado secretario del Politburó , cargo que ocuparía hasta su muerte.

Muchos historiadores consideran que el papel de Stalin durante la revolución bolchevique de octubre fue menor, pero en 1918 escribía lo siguiente del hombre que años más tarde ordenó asesinar: «Todo el trabajo práctico relacionado con la organización de la revuelta fue hecho bajo el mando directo del camarada Trotski... Se puede decir con certeza que el partido tiene con él una deuda de primera magnitud por la rápida concienciación de la guarnición hacia el bando de los soviet y por la manera tan eficiente en la cual fue organizado el trabajo del Comité Militar Revolucionario ». Ya en 1924, sostendría que había sido él quién dirigiera todas estas actividades a través de la «Central del Partido», pero los historiadores no encuentran ninguna prueba de ello.

En Abril de 1922, fue nombrado Secretario General de Partido Comunista, un cargo que le permitió poner a sus aliados en los puestos claves de la organización. Acumuló poder de una forma inesperada ante la pasividad de un Lenin moribundo. En enero de 1924, tras la muerte de Lenin, Stalin y sus aliados Kámenev y Zinóviev toman el poder. El discurso de los tres se sitúa entre el de Trotski, a la izquierda del partido, y el de Bujarin, que representaba el ala derecha.

Stalin abandona entonces las tesis respecto a la revolución internacional en favor de una política que pretende construir el «socialismo en un solo país», en claro contraste a la teoría de Trotski de la revolución permanente. En la lucha por el poder Stalin fue eliminando a todos sus rivales, primero al ala derecha de Bujarin y luego a Trotski. Corrían los años treinta del siglo XX, y habían comenzado las celebres purgas. De ellas escribió en «El Gran Terror» el historiador británico recientemente fallecido Robert Conquest . En esta obra, escribía Conquest «en las acciones que aquí se registran veinte vidas se perdieron, no por cada palabra, sino por cada letra de este libro». Un total de quince millones de muertos.

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