De pintar trenes a una sala de subastas
Los grafiteros Sfhir y Pastron7 presentarán «Arte urbano en directo» en la sala de subastas Durán del 21 al 29 de julio
«No se puede criminalizar el grafiti» , dice el artista urbano Sfhir ante un gran mural que, codo a codo con Pastron7, está pintando en la sala de subastas Durán , un espacio atípico para este tipo de arte que hasta el día 29 de julio acoge la iniciativa «Arte urbano en directo».
«Te llama una casa tan grande como Durán y lo primero que te impone es respeto , pero al final la cosa fluye porque ellos trabajan con el arte, y nosotros representamos el grafiti, que no sabemos si es arte o no, pero estamos encajando bastante bien», ha contado Paco Reyes, alias Pastron7 , en una de las pausas en la elaboración de la obra, todavía sin título.
Este gran cuadro intenta transmitir « el espíritu del "grafitero" mezclándolo con arte moderno », según cuenta Hugo Lomas, conocido como Sfhir , con una metáfora pictórica en la que varios personajes corren con botes de pintura en la mano.
«Es un guiño a todas las aventuras que se pasan pintando trenes o en la calle, a todo ese mundillo de la nocturnidad y de colarse en sitios», explica Lomas mientras señala su creación, en la que se dejan ver un muro derruido y vagones de trenes pintados con grafitis callejeros.
Más allá del grafiti
A este arte urbano realizado en directo, se suma una colección de muebles industriales que los artistas «han intervenido» para exponerlos y ponerlos a la venta junto al mural.
«Con el grafiti normalmente se trata de aprovechar el medio, de intentar aportar algo nuevo , y cuando ves muebles como estos que tienen un montón de historia y son ya preciosos de por sí, dan ganas de intervenirlos y de intentar aportar algo más bonito», comenta Lomas, que lleva desde 1995 dedicado al grafiti .
Además, Reyes, que comenzó a manejar sus primeros botes de spray en 1984, impartirá un taller de grafiti que intentará «acercar esa forma de expresión tan desconocida a la gente, para que se familiaricen con ella».
Aprender a usar el bote de spray, conocer la historia del nacimiento de este arte y por qué comienza, así como ser consciente de «dónde no se debe hacer grafiti», y crear un primer boceto son algunos de los contenidos de este taller, que tendrá lugar los días 27 y 28 de julio.
Con «Arte urbano en directo» , también se persigue demostrar que se trata de una actividad «que se puede llevar a galerías y puede convivir en la calle sin molestar», explica Reyes. «Está muy bien que la gente venga aquí y vea que somos gente normal, gente seria y mayor, que hace estas cosas y que no es nada peligroso ni extraño», agrega.
En cuanto a las posibles críticas de otros grafiteros que defienden que su lugar está estrictamente en las calles, Reyes no se preocupa y cita una rima del rapero «El Chojin» para mostrarlo: «Antes me importaba, y ahora no me importa, y es que con el tiempo he aprendido una cosa, se pierde tiempo odiando y tiempo es algo que no sobra », concluye.