«En la piscina me transformo e intento dar lo mejor de mí»

Cuando el artista sube al tablao y proyecta su alma se dice que «tiene duende». Pero eso tan especial también puede ser capaz de tenerlo un deportista. Quizá cambiando la madera por el agua viendo a una nadadora apasionada por lo suyo. Pues Merche Peris Minguet (Valencia, 5/1/1985) tiene ese duende, que lleva dieciséis años sacando en las piscinas. Ahora le toca hacerlo en el campeonato de España Open de Primavera, que arranca hoy en Málaga.

Tiene ganas y fuerza, aunque es cauta. «Yo lo daré todo y que sea lo que Dios quiera», explica a ABC, al tiempo que refrenda que el objetivo por el que ha entrenado junto a su preparador Bart Kizierowski es «poder ir a Kazan, ir al Mundial». Hilvana su temporada a partir del Open en la Costa del Sol, luego buscará el Mare Nostrum y el campeonato de España estival, y se enfocará hacia la cita mundialista.

La clave para ella es mesurar la temporada con la experiencia que da el tiempo y los éxitos: «Mis padres siempre me lo ha inculcado así. Ir poco a poco; peldaño a peldaño. Pero siempre constante». La valenciana, del Club de Natación Santa Olaya, inscrita el 50 libre y el 50 y el 100 espalda, subraya que «espero poder dar lo mejor de mí. Como dice mi psicólogo Pablo del Río: ‘Voy a dejar que el cuerpo haga lo que ha entrenado’».

Merche luce en la parte posterior de su cuello los aros olímpicos. Estuvo en Pekín 2008. Pero quiere y ensueña con otra cita. Río de Janeiro 2016 ya no queda tan lejos. Poco más de un año. Asegura en cuanto a la cita brasileña que «mi sueño es poderme retirar en unos Juegos. Queda ya muy poco para Río y el trabajo para ello ya empezó hace tiempo. Es muy emocionante, pero también muy complicado».

Esa ensoñación, sin embargo, no le despista de la realidad, refrendada por esa idea de ir poco a poco. Y primero quiere lucirse, cuanto menos va a Málaga para vaciarse enérgicamente en la piscina, en este Open: «En los próximos cuatro días me transformo. Saldrá lo mejor de mí o por lo menos lo intentaré».

Merche, lógicamente, una pura sangre de la natación como los expertos la han calificado en diversas ocasiones, disfruta en el agua. Pero el alto rendimiento no solo es cuestión de marcas, de tiempos, de medallas... Para poder seguir adelante se necesitan apoyos. Cuenta sobre esto que «hoy en día la cosa está muy complicada para todo el mundo; así que te buscas la vida o dejas de hacer cosas si no se puede».

Dice respecto a esa situación que «más que dar rabia, decepciona. En muchas ocasiones se te trata como si tu trabajo no valiera para nada y duele que tantísimos años de trabajo y esfuerzo no se valoren».

Ella ha entrado a formar parte del proyecto «Patrocina un deportista» en busca de esos respaldos y encontrando una vía para trasladar su experiencia. «Consiste en el apoyo de las empresas a los deportistas. El nombre de la empresa quedaría vinculado al deportista y la empresa ayuda a éste con 99 euros al año. El deportista puede cubrir sus necesidades y promociona a la compañía que colabora».