EL PROBLEMA DEL AGUA

El Júcar-Vinalopó funcionará antes de verano para paliar la sequía

El Gobierno escenificará este acuerdo histórico como el Memorando Tajo-Segura en Madrid

El Júcar-Vinalopó funcionará antes de verano para paliar la sequía juan carlos soler

J. L. FERNÁNDEZ

El acuerdo para reactivar el trasvase Júcar-Vinalopó paliará los efectos de la acuciante sequía que padecen los campos alicantinos, donde la situación ha llegado al extremo de provocar el arranque de árboles secos, una circunstancia que no se recuerda en las últimas décadas.

Para el presidente de la Junta de Usuarios del Vinalopó, L’Alacantí y el Consorcio de Aguas de la Marina Baja, Andrés Martínez, las condiciones pactadas son satisfactorias y tan solo esperan que el Ministerio de Medio Ambiente haga oficial este acuerdo –anticipado por ABC– que se escenificará en Madrid en un acto similar al que se organizó para comunicar el Memorando del Tajo-Segura.

La llegada de caudales está prevista para antes del verano , de forma que acabe con las penurias sufridas en el anterior año hidrológico, con registros históricamente bajos de precipitaciones, los más pobres desde que se recogen datos estadísticos, prácticamente en el último siglo. De hecho, la primera transferencia del Júcar-Vinalopó se materializó el pasado verano con ocho hectómetros cúbicos para un riego de emergencia.

Por ahora, el trasvase se va a efectuar desde la segunda toma del Azud de la Marquesa –para riego– y con aportes adicionales de agua para abastecimiento humano desde el pantano de Alarcón, lo que permitirá abaratar los costes de bombeo. En el primer envío de caudales del verano pasado, el beneficio alcanzó a unos 16.000 agricultores y 20.000 hectáreas de forma directa. Y además de a este sector profesional clave para la economía regional, la repercusión positiva es extensiva a más de un millón de habitantes residentes en 34 municipios de la provincia de Alicante, según los cálculos del Consell.

Inversión de 30 millones

Otra medida encaminada a calmar la sed de los cultivos alicantinos se fraguó el pasado viernes con el borrador del Real Decreto de sequía para el Segura, que entre otras medidas establece un reparto del agua con la cesión por parte de los agricultores de los denominados «riegos tradicionales» a los que dependen del trasvase Tajo-Segura. El presidente de la Federación Provincial de Regantas de Alicante, Ángel Urbina, aseguró que así se garantizan las necesidades hasta el 31 de diciembre de este año.

Y el Consejo de Ministros aprobará previsiblemente en un mes este documento que contempla inversiones de 30 millones de euros, entre ellas la construcción de la conexión al Valle del Guadalentín, en las localidades murcianas de Lorca y Totana. El texto incluye también la creación de una Comisión Permanente de la Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Segura para agilizar la incorporación de agua desalada, los intercambios de derechos de agua y la batería de pozos de sequía en caso de que se mantenga la situación motivada por la escasez de recursos, si bien Urbina matizó que acudir a estas fuentes subterráneas debe ser el último recurso, por su agotamiento.

En enero, el índice global de la cuenca entró en situación de prealerta por el estado del subsistema del trasvase, que estaba en situación de alerta, mientras en el del Segura había normalidad. De ahí la cesión de caudales.

El Júcar-Vinalopó funcionará antes de verano para paliar la sequía

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación