El Valencia pagará a plazos hasta 2024 su deuda con el Ayuntamiento
A las puertas de las elecciones municipales y una década después de la firma del convenio para la construcción del nuevo estadio, el Ayuntamiento y el Valencia Club de Fútbol han alcanzado un acuerdo para aplazar la deuda que este último debía aportar, junto a 18 parcelas en distintos puntos de la ciudad.
El abono –que el club podrá pagar en diferentes plazos hasta 2014– está cifrado en 19,8 millones de euros, pero el Consistorio ingresará finalmente 23,3 millones por los intereses añadidos obligatoriamente por ley y que son del 3,5 por ciento.
La firma del acuerdo se producirá, según explicó ayer la alcaldesa de la ciudad, Rita Barberá, «de manera inmediata, a principios o mediados de marzo» y, con ella, llegará el primer pago de 990.846 euros, que equivale al cinco por ciento del total.
Barberá, quien mantuvo una reunión con el presidente ejecutivo del Valencia, Amadeo Salvo, calificó el acuerdo como «una solución rápida, ágil y plenamente satisfactoria» para todas las partes, que «disipa cualquier duda». Según detalló, también supone la reanudación de las obras suspendidas en febrero de 2009 una vez concluya la actualización del proyecto que lleva a cabo el club.
El el convenio firmado en su día, el Ayuntamiento cedió la parcela de Cortes Valencianas, tasada en 45,4 millones, a cambio de 18 parcelas para uso deportivo en el barrio de Malilla, en la Ciudad del Artista Fallero, en la Ciudad del Aprendiz, en Favanella junto a la estación de Beniferri y en la Fuente de San Luis, valoradas en 25,6 millones. La diferencia para completar la permuta, de 19,8 millones, es lo que ahora se solucionará en pagos aplazados.
Garantía
Como garantía en caso de incumplimiento, el Consistorio se quedaría con el aparcamiento de 3.000 plazas y con el suelo terciario previsto en el solar de 70.000 metros cuadrados de Cortes Valencianas.
El Valencia señaló ayer en un comunicado que este acuerdo «permite consolidar por parte del club la propiedad de la parcela» y «demuestra la responsabilidad de la entidad de Mestalla y de sus propietarios por afrontar las deudas pendientes con la Administración Pública, que quedan así solucionadas». En este sentido, indicó que «se trata de un hecho relevante para la reactivación y finalización de las obras del nuevo estadio», que «será un icono del valencianismo y de la ciudad de Valencia». En este sentido, recordaron uno de los compromisos que adquirió el nuevo dueño del Valencia, el empresario singapurense Peter Lim, al convertirse en máximo accionista, y que fue finalizar las obras del nuevo feudo «che» para 2019, año del centenario del club.