ENTREVISTA al Alcalde de Alicante
Miguel Valor: «Me ilusiona el trabajo que hay en Alicante y me veo con fuerzas»
El regidor alicantino repasa en una entrevista con ABC su primer mes con bastón de mando
Reconoce tener el Ayuntamiento «patas arriba». Basta observar sólo unos minutos la planta cuarta del Consistorio, donde se encuentra su despacho, para comprobar que no miente. Carreras de asesores con papeles para un lado y para otro, un teléfono que no deja de sonar, colas en la sala de espera para entrar a verle e incluso la visita de algún concejal apresurado. Hoy se cumple justo un mes desde que Miguel Valor tomara posesión como alcalde de Alicante en sustitución de Castedo. Este es su balance.
—¿Cuál ha sido el mayor cambio que ha encontrado con respecto a ser concejal?
—Fundamentalmente la intensidad del día a día. Es un periodo intenso con muchas reuniones, a veces con hasta 10 ó 12 grupos en una jornada. Desde sindicatos a patronal, asociaciones, colectivos y otros agentes sociales de Alicante. En todas he percibido el cariño y la disponibilidad a colaborar de todos ellos. Es un poco estresante escuchar tanta demanda junta, pero es bueno porque van acompañadas de planteamientos interesantes.
—Este es entonces ya un rasgo de su gobierno.
—Consenso, consenso y consenso. Es así, aunque a veces cuando se va tan rápido se puede cometer algún fallo y más de uno cometeremos, pero ahora estamos funcionando como quiere el ciudadano.
—¿Por qué antes no era así?
—Sí, sí era. Los colectivos venían, pero ahora con el cambio de Alcaldía todo el mundo quiere conocerme. La verdad es que con ello estoy haciendo un máster en administración pública porque yo antes lo que conocía era el área de cultura y deportes. Si no fuera así no podría llevarlo adelante porque son muchas cosas y el trabajo es arduo.
—Se han presentado muchos proyectos e incluso se han tumbado otros en poco tiempo. Incluso usted ha reconocido ir «acelerado». ¿Tanto había por hacer?
—Sí, toda la vida he sido así, acelerado. Desde luego, hay muchas cosas por hacer. Antes no lo sé porque yo estaba en la Concejalía de Cultura. Lo que es evidente es que hay mucha gente que viene con ideas y a proponer cosas. En ello estamos.
—Ha tumbado el PGOU y denegado la prórroga de la contrata de limpieza a Ortiz, así como la de infraestructuras festivas. ¿Hay una intención de romper con la etapa anterior?
—No, en absoluto. La etapa anterior la respeto. Creo que Sonia hizo un buen trabajo y lo que tengo que intentar es hacerlo mejor si puedo todavía, aunque es difícil. La época Castedo fue positiva, con una gran relación de cosas que se han hecho en Alicante
—¿Por qué se han retirado esos proyectos entonces?
—Han cambiado las circunstancias y el momento. Queremos hacer nuevas subastas para abaratar costes y adecuarlo al momento actual.
—¿Es esto un mensaje a ciertos empresarios de la ciudad?
—No, no va contra nadie. Yo simplemente llamo a los técnicos y al concejal que lleva cada tema y decidimos conjuntamente qué se puede retirar y qué no. Creemos que lo que hemos retirado ahora se puede sacar por menos dinero y con más detalle. En la limpieza de dependencias municipales incluiremos nuevas instalaciones, como por ejemplo el MACA, y en la contrata de fiestas puede ampliarse la distribución de sillas para actos de patronatos. Son sólo dos ejemplos. Se trata de que el Ayuntamiento ahorre dinero, tenga cubiertos más servicios y así se pueda destinar más recursos a servicios sociales.
—La oposición dice que se trata de un gesto de cara a la galería.
—No me conocen. Bueno, sí, porque saben que toda la vida he sido así y que siempre he actuado con consenso hasta decidir y que, cuando lo tengo decidido, no dejo pasar tiempo.
—¿Los 14 millones de euros recibidos del Fondo de Impulso Económico generarán más deuda en la ciudad?
—Son condiciones muy buenas, sin intereses. Es algo que beneficia a Alicante porque se devolverá a largo plazo, sin intereses y con carencia el primer año. Cualquier industrial al que le dieran estas condiciones se lanzaría en picado, y cualquier persona en su casa.
—¿Cuáles son esos proyectos y cómo se va a beneficiar el ciudadano?
—Son actuaciones fundamentales tanto para los residentes como para atraer turismo. Desde el nuevo paseo de la playa de San Juan en la avenida de Niza, al pirulí de telecomunicaciones para quitar las antenas de San Fernando y Santa Bárbara, o el nuevo acceso al castillo desde el Postiguet, además de la Plaza Séneca. Será positivo para atraer visitantes a Alicante, crear trabajo y dinamizar el comercio. La inyección de dinero es fundamental para llevar todo esto a cabo, con la ayuda y colaboración de Isabel Bonig y su Conselleria de Infraestructuras.
—Entre todos ellos, todas las miradas están puestas en la implantación de IKEA. ¿Es tan necesario?
—Es importante porque va a generar muchos puestos de trabajo y turismo, porque mucha gente que venga a comprar a Ikea visitará también la ciudad, comerá en los restaurantes o comprará en otras tiendas. En Murcia hay colas de alicantinos los festivos en la localidad o la provincia, y en Alfafar se ha asegurado que no ha influido para nada en el pequeño comercio. Cualquier población de alrededor no se lo pensaría. Como Elche, tal y como ha reconocido su alcaldesa, Mercedes Alonso. También San Vicente y San Juan están expectantes por si nosotros lo dejamos pasar. Es una oportunidad que no podemos perder.
—Las reticencias, sin embargo, son por parte del pequeño comercio.
—Sí, por eso nos estamos reuniendo con las asociaciones para intentar consensuar y ver qué podemos hacer. De todas formas hay muchas cosas que no nos corresponden a nosotros, sino a Conselleria y la tramitación de la ATE (Actuación Territorial Estratégica). Nosotros podemos influir y consensuar, pero es Conselleria quien lo hará. No descartamos ni siquiera presentar alegaciones junto a algún colectivo en las cuestiones que no consideremos oportunas.
—La ATE no sólo contempla un centro comercial. ABC ya avanzó que incluso se prevé una zona para que parque científico de la UA.
—Así es. También amplias zonas verdes, jardines y suelo para uso común que dará aire a la ciudad.
—Hay indicadores que muestran una recuperación del consumo en Alicante, aunque esto conlleva nuevos problemas. Por ejemplo, las molestias del Tardeo en la zona centro.
—Vamos a ver cómo solucionamos eso, aunque hay que diferenciarlo del fenómeno del botellón. Tanta gente en las terrazas o en las puertas fumando genera un elevado nivel de ruido, pero aquí no hay nada ilegal. Vamos a extremar la vigilancia en los locales y, sobre todo, vamos a hacer un intenso trabajo para concienciar tanto a los empresarios como a los clientes de que hay vecinos con los que convivir.
—No se puede obviar la polémica generada en torno a Juan Seva, titular del área de Seguridad y ya exconcejal de Hacienda tras la sentencia del caso Lucentum.
—Le honra el gesto que tuvo porque se echó a un lado a pesar de que no hay sentencia en firme. Además, según nuestro servicio jurídico, podría haber continuado en Hacienda perfectamente, pero ha salido de él para no alimentar polémica. Es un hombre indispensable para mi equipo y le voy a apoyar siempre. La condena era algo administrativo.
—Parece que por fin Alicante tendrá palacio de congresos: en Ciudad de la Luz.
—Sí, y ya estamos viendo cómo vamos a explotar eso con Agustín Grau, director del Patronato de Turismo. Se está preparando un informe para determinar la mejor manera de llevarlo a cabo. Se trata de una gestión hecha en su día por Sonia Castedo que soluciona una reivindicación del sector empresarial, hotelero y hostelero.
—Usted es especialista en cultura. ¿Qué se puede hacer en ese área?
—Mucho, y ya estamos en ello. Las máquinas ya se encuentran en el antiguo secadero de la fábrica de tabacos para ampliar Las Cigarreras y darle un aforo de 1.500 personas, por lo que será referente para albergar gran parte de la cultura. Vamos a reforzar la programación para los próximos meses y que Alicante ejerza realmente de casa de la primavera. Además, el castillo de Santa Bárbara está entre los 10 monumentos más visitados de España, pero queremos ir más allá y realizar visitas conjuntas y guiadas con el castillo de San Fernando, donde se van a realizar mejoras para cerrarlo y recuperarlo como jardín romántico de la ciudad.
—Da la sensación de que su llegada a la Alcaldía ha suavizado la carrera interna por encabezar la lista. ¿Es así?
—Tengo 17 concejales muy unidos, que van todos por el mismo camino y me apoyan para llegar a lo máximo posible, algo que antes no conseguíamos del todo. Cualquiera de ellos sería un excelente alcalde.
—¿Y usted, se ha planteado continuar?
—Cuando me propusieron sustituir a Sonia me lo tomé como una etapa de cinco meses para después jubilarme. Ahora, una vez que he visto todo lo que hay por hacer, me he ilusionado y estaría a disposición del partido si me consideran necesario.
—¿Se han puesto en contacto con usted para ello?
—No. Sólo me entero por los medios de comunicación.
