Las entidades financieras han cerrado otras 392 sucursales durante el último año

Las entidades financieras que operan en la Comunidad Valenciana han cerrado en el último año 392 oficinas (una media de más de una sucursal al día) en la región. Aunque el grueso del proceso de reestructuración del sistema bancario se concentró entre los ejercicios 2012 y 2013, las operadoras del sector han continuado con el plan de ajuste de gastos que ha derivado en un descenso de la red de oficinas.

En concreto, de acuerdo con los datos aportados por el Banco de España, en la Comunidad Valenciana había un total de 3.218 sucursales bancarias al cierre del tercer trimestre de 2014, cuando un año antes había 3.610 oficinas operativas.

De esa forma, la red de sucursales cae a niveles anteriores al comienzo de la expansión inmobiliaria en el que las cajas autóctonas (hoy desaparecidas a excepción de Caixa Ontinyent) y las fóraneas emprendieron un proceso de expansión en la Comunidad Valenciana al calor del auge del sector inmobiliario.

La reducción de oficinas se reproduce en las tres provincias por igual. Así, Valencia ha pasado de las 1.896 sucursales bancarias en el tercer trimestre de 2013 a las 1.655 de la actualidad. En el caso de Alicante se ha pasado de 1.263 a 1.155, mientras que en Castellón la red bancaria se ha reducido desde los 451 puntos de venta hasta apenas 408.

Este proceso ha afectado especialmente a los habitantes de pequeñas poblaciones de comarcas del interior, que han visto como su municipio se quedaba sin sucursales de entidades financieras, fundamentalmente en aquellos lugares en los que operaban las cajas de ahorros de la Comunidad Valenciana que han desaparecido.