cultura
El Plan Estratégico de Les Arts prevé un presupuesto de 30 millones en 2018
Catalá anuncia la inminente cancelación del déficit de tres millones de euros que arrastraba la ópera valenciana
Por primera vez desde que la crisis económica llamara a su puerta, el Palau de les Arts vuelve a mirar al futuro con optimismo. Es pronto para cantar victoria –todavía queda un mes y medio para el cierre del ejercicio-, pero la consellera de Cultura ya adelantó ayer que las medidas de ahorro y eficiencia aplicadas durante los últimos meses podrían cancelar el déficit de tres millones de euros que arrastraba el teatro. María José Catalá –que con esta noticia se marca un buen tanto a seis meses de las elecciones autonómicas- subrayó además que en 2015 la Generalitat aumentará el presupuesto el Palau de les Arts en 1,76 millones de euros, elevándolo hasta 21,5. La primera subida en siete años.
Varios son los factores que explican que se haya obrado el «milagro». La buena sintonía entre la intendente, Helga Schmidt, y el nuevo gerente del coliseo, Francisco Potenciano, ha sido clave para que tanto los gastos corrientes como los derivados de la producción artística hayan descendido notablemente. Otro elemento explicativo está en la salida de 38 trabajadores mediante el ERE ejecutado en julio, y el recorte del 8% lineal en los salarios.
Cuentas saneadas, plantilla reestructurada y gestión eficiente. Éste es el escenario del que parte el plan estratégico 2015-2018, con el que la Conselleria tratará de convencer al Ministerio antes de final de año para que entre en el Patronato del teatro y aumente su subvención, situada actualmente en 423.000 euros.
El documento, de más de noventa páginas, realiza una proyección de gastos e ingresos que prevé una mayor actividad artística –pasar de cinco óperas anuales a ocho, de las cuales 2 ó 3 serían propias y el resto alquiladas o coproducidas– y un incremento paralelo y gradual del presupuesto, que alcanzaría los 30 millones de euros en 2018. Esta propuesta prevé también que las subvenciones al Palau de les Arts lleguen a alcanzar el 17% del presupuesto total. Entre 4 y 5 millones de euros, que en todo caso siempre podrán reajustarse, dependiendo de cómo se desarrollen las negociaciones con el Gobierno central.
El plan estratégico incluye además un minucioso diagnóstico de los puntos fuertes del teatro (los 32 espacios susceptibles de alquiler; el Centro de Perfeccionamiento; las 37 producciones propias que generan ingresos al alquilarlas a otros teatros, etc). Paralelamente, el documento establece un plan de buen gobierno y transparencia y un nuevo sistema de patrocinios.
Además de ser una carta de invitación seria y bien justificada ante el Ministerio, el plan estratégico es fundamental a nivel interno. Una vez se consensue con todas las partes, este documento-marco permitirá realizar contrataciones con cuatro años de antelación (lo que supondría un ahorro notable en los cachés de los artistas) y competir en condiciones de igualdad con otros teatros para poder llenar los patios de butacas con más público extranjero. La mayor actividad, sumada a la eficiencia, debería redundar en un incremento de los ingresos por venta de entradas y de los patrocinios. A medio plazo, el objetivo es conseguir que el Palau de les Arts se sostenga con menos del 50% de dinero público.