Elecciones a Rector
El catedrático Quiles Flor repetirá como candidato
El catedrático de Arquitectura y Tecnología de Computadores, Francisco José Quiles Flor, hizo pública ayer su intención de concurrir de nuevo a las elecciones al Rectorado de la Universidad de Castilla-La Mancha que se celebrarán en el último trimestre del año.
Quiles Flor, que concurrió al proceso electoral del año 2011 llegando hasta la segunda vuelta en la que se impuso con escaso margen al actual rector, Miguel Ángel Collado, indicó que su decisión se basa en un «compromiso público» de ofrecer a la comunidad universitaria y a la sociedad «un proyecto de Universidad diferente» a la que se ha vivido estos últimos cuatro años.
Según explicó en un comunicado remitido a los medios de comunicación, ese proyecto pretende responder a las necesidades presentes y futuras de la Universidad, contribuyendo al desarrollo socio-económico y tecnológico de la Comunidad Autónoma y que, a su vez, posibilite a la UCLM recuperar el papel que le corresponde en la sociedad.
Francisco José Quiles Flor, que hasta hace cuatro años fue vicerrector de Investigación, destacó que en estos últimos cuatro años, la UCLM ha afrontado «un largo periodo de turbulencias y cambios negativos» que, a su juicio, están provocando grandes incertidumbres sobre el futuro de la Universidad regional.
Recordó que la «drástica reducción» en la financiación de la UCLM, «pactada por el anterior Gobierno regional y por el de la UCLM», ha puesto en peligro su actividad básica, además de resaltar muchos de los problemas y limitaciones de la institución académica, al tiempo que lamentó que el equipo rectoral de Collado, «no ha sabido responder adecuadamente» a los retos que ha tenido que afrontar la Universidad «ni tampoco ha sido capaz, por sus formas de gestión, de integrar a toda la comunidad universitaria entorno a un proyecto común de Universidad».
Apostó por «invertir la situación» implantando modos de gestión diferentes que se basen en lograr una UCLM «transparente, dialogante, participativa, no excluyente, integrada en la sociedad y, por supuesto, sostenible económicamente».