Unipublic podría hacerse cargo de la Vuelta a Toledo

Unipublic, la empresa que organiza la Vuelta Ciclista a España, podría también hacerse cargo de la Vuelta a Toledo y organizar esta carrera a partir del año que viene. Aunque de momento no hay nada asegurado, a este periódico le consta que ya ha habido negociaciones entre Unipublic y la actual organización de la Vuelta a Toledo. De fructificar estas conversaciones, la carrera toledana incluso podría dar un salto y pasar a ser profesional (ahora es de categoría sub-23).

Además de Unipublic, hay otros tres empresarios de la provincia (uno de la capital, otro de Menasalbas y otro de Los Navalucillos), interesados en hacerse cargo de la organización de la Vuelta a Toledo. Para empezar se necesitan en torno a 50.000 euros y el asunto no es baladí, puesto que tras la decisión de Federico Martín Bahamontes de dejar la carrera que lleva organizando desde su inicio en 1966, había mucha incertidumbre por ver quién cogía el relevo y hasta la fecha nadie se había interesado.

Ayer, en el podio de meta, Bahamontes fue preguntado de nuevo por este asunto y su respuesta fue tajante: «Es la última, lo digo yo, no lo decís vosotros, y cuando yo lo digo, lo mantengo». Terminada la carrera, Bahamontes también manifestó estar «tranquilo» porque «ya voy a poder dormir, que hace dos semanas que no lo hago».

En lo estrictamente deportivo, la Fundación Ciclista Euskadi reventó ayer la carrera al meter a tres hombres en la escapada del día, que llegó a contar con más de cuatro minutos de ventaja, y llevarse la etapa y la general. Mikel Iturria y Mikel Aristi coronaron primeros la última cuesta antes de la plaza de Zocodover y cruzaron la meta dados de la mano. Iturria ganó la etapa; Aristi la general.

Minutos después de cruzar la meta, sin bajarse aún de la bicicleta, Aristi (22 años, natural de Vergara, en la provincia de Guipúzkoa, y estudiante de INEF) decía: «Creo que llevamos haciendo las cosas bien desde el primer día, pero por una cosa o por otra no salía. Hoy hemos salido al ataque, hemos puesto toda la carne en el asador y conseguimos mucha ventaja al principio de la carrera que nos ha bastado para ganar la etapa y la Vuelta. Hemos atacado en un momento inesperado y nos hemos aprovechado de que había dudas en el pelotón».

Además de Aristi, el gran protagonista de la cuarta y última etapa fue Miguel Indurain, el ciclista español con mejor palmarés de la historia. Indurain vino a Toledo invitado por Federico Martín Bahamontes en su despedida de la carrera y no paró de firmar autógrafos y de hacerse fotos. Cuando era amateur, Indurain corrió dos ediciones de la Vuelta a Toledo (en 1983 y 1984), ganando una etapa cada año. «Eran etapas de fuerza, de bastante aire y ahí me defendía bastante bien», recordó ayer. Como curiosidad, el hijo de Indurain, con el mismo nombre que su padre, corrió el año pasado la Vuelta a Toledo y este año volvía a estar entre los inscritos, pero se cayó a última hora por «problemas estomacales».