El PP abre un expediente disciplinario al alcalde de Villares
El Comité de Derechos y Garantías del Partido Popular de Castilla-La Mancha acordó ayer abrir un expediente disciplinario al alcalde de Villares del Saz (Cuenca), José Luis Valladolid, por la comisión «de una presunta infracción» por las declaraciones publicadas en su perfil de Facebook, en las que calificó a la portavoz regional del PSOE, Cristina Maestre, de «puta barata podemita»..
En un comunicado, el PP señaló que esta «presunta infracción» está tipificada en los artículo 15.1.a y 15.1.e de los estatutos del partido, los cuales regulan la actuación con negligencia en el ejercicio de las funciones y las manifestaciones en descrédito o menosprecio de otro afiliado. En el caso de este último, el PP matizó que, aunque la ofendida no es militante del partido, «resulta acreedora de la misma protección que si lo fuera» por la aplicación del artículo 2 de los estatutos, que define al partido como «una formación política que defiende la dignidad del ser humano y los derechos y libertades que le son inherentes», entre los que está del Derecho al Honor, consagrado por el artículo 18 de la Constitución Española.
Las palabras de José Luis Valladolid, que han tenido una fuerte repercusión mediática durante los últimos días, causaron malestar en las filas del partido.
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, se pronunció ayer a este respecto, afirmando que «no se puede insultar a las mujeres que estamos en política por el hecho de ser mujeres», y asegurando que ella misma ha sufrido este tipo de injurias. No obstante, poco después recordó que «antes de que pasaran dos horas pidió disculpas».
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, calificó de «injustificables» y «absolutamente reprobables» las palabras del alcalde, señalando que tienen elementos de «desprecio por razones de género», además de ser un «insulto personal».
Por su parte, el Vicesecretario Sectorial del PP, Javier Maroto, manifestó ayer que es «totalmente inaceptable utilizar el exabrupto y la descalificación para referirse a un adversario político» en los tiempos en los que estamos.
Poco antes de que el PP hiciera pública su intención de abrir un expediente disciplinario a Valladolid, el alcalde de Villares del Saz había comunicado que no iba a abandonar su cargo, asegurando que «la dimisión se la tenía que pedir su pueblo» y respondiendo así a las peticiones de dimisión por parte de Podemos, el PSOE de Castilla-La Mancha y miembros de su propio partido, como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, o la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre.
Valladolid recordó que ya pidió perdón por sus palabras a la portavoz del PSOE, calificando el hecho como «un calentón del momento» y asegurando que no podía pedirle disculpas personalmente a la edil socialista al no haber coincidido. De igual modo, reconoció haber «cometido un error», aunque señaló que él ha visto cosas peores «y aquí no ha pasado nunca nada».
Valladolid, que lleva gobernando doce años «gratuitamente y por su pueblo», aseveró que «gana más dinero fuera que dentro», matizando así que no cobra por desempeñar sus funciones. Además, afirmó que «por supuesto» entendía que el PP le abriera un expediente y estudiara una sanción.