Marín toma posesión como secretario de Estado de Educación
Promete «entregar lo mejor de sí mismo» y trabajar con perseverancia
El que fuera consejero de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Marcial Marín, tomó ayer posesión de su nuevo cargo como secretario de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, prometiendo que «entregará lo mejor de sí mismo» con «responsabilidad y absoluta convicción de servicio público».
Marín, quien destacó que «está preparado» para ostentar el puesto, destacó que la calidad de la educación española «no puede ser solamente declaraciones» y señaló que ése será su principal objetivo como secretario de Estado en esa modalidad.
«Estoy preparado para dedicar todo el esfuerzo para que la educación sea garante de nuestra democracia», declaró Marín, enfatizando que todos los ciudadanos «vivan donde vivan» tengan derecho a la educación.
«Habrá ocasiones en las que nos encontremos con desacuerdos, pero la fuerza del diálogo y la generosidad de todos lograrán que consigamos garantizar el derecho a una educación en condiciones de equidad para todos, desde la formación inicial hasta la formación superior», expresó Marín durante su toma de posesión.
Al acto acudieron el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Iñigo Méndez de Vigo; la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal; representantes de los sindicatos de profesores y algunos rectores de universidades, entre otros. También juró su cargo el nuevo jefe del gabinete del ministro, Manuel Barranco.
Para María Dolores de Cospedal, quien «se fijó» en él hace poco más de ocho años y «le fichó para la política con mayúsculas», el edil del PP sólo tuvo buenas palabras: «Me enseñó los valores de la constancia, la honradez, la cercanía, el trabajo en equipo y, sobre todo, la lealtad».
Por su parte, el ministro destacó el «profundo conocimiento del sistema educativo» del exconsejero de Educación de Castilla-La Mancha, subrayando su «inteligencia, decisión y firmeza» a la hora de enfrentarse a ciertos problemas en su antiguo cargo como consejero autonómico.
En alusión a Marín y Barranco, el ministro aseguró que estaba «completamente seguro de que ellos van a poner lo mejor que tienen al servicio de este trabajo». «He tenido mucha suerte porque he encontrado a dos personas de las que me enorgullezco que quieran acompañarnos en esta etapa», concluyó.