Las exportaciones, el balón de oxígeno de la economía conquense
Las exportaciones de la provincia de Cuenca batieron en 2014 un nuevo récord hasta llegar a los 329 millones de euros. Suponen un gran tirón para la economía conquense que va despertando poco a poco de la crisis económica según refleja un informe de la Confederación de Empresarios de Cuenca (CEOE-Cepyme).
Los productos que llevamos a otros países siguen creciendo dado que el año pasado se superó la cifra de 2013 de 320 millones de euros y la de 2012, de 272. En el año 2007 se exportaron bienes por valor de 140 millones de euros. Durante el año pasado, sobre todo productos agroalimentarios a países como Francia.
Además, la balanza comercial sigue siendo positiva dado que las importaciones sumaron 90 millones de euros. Así lo destacó ayer el presidente de la Confederación de Empresarios de Cuenca, Abraham Sarrión, quien arropado por varios miembros de su comité ejecutivo presentó el análisis económico de 2014 y los años precedentes que han elaborado. Lo han hecho con datos oficiales extraídos del Banco de España, el Instituto Nacional de Estadística (INE), la Seguridad Social o la DGT, entre otros. Los resultados extraídos los darán a conocer ahora a diversas administraciones.
Ese informe también refleja sin embargo que el 27% de la población activa está en paro (frente al 9,8% del 2007, año del inicio de la crisis). No obstante, los datos del paro registrado señalan que el desempleo se redujo en los últimos dos años en un 10%. Eso sí, en 2007 había 8.214 desempleados en la provincia frente a los 18.783 de 2014. Sin embargo, son menos que en 2012, cuando se contabilizaron 21.424. El informe también pone de manifiesto que en 2014 creció el número de autónomos y experimentó un pequeño repunte, hasta los 19.243. Todo ello les hace ser optimistas los próximos meses.
De otro lado, Sarrión mostró su preocupación por los efectos comerciales, dado que sigue habiendo un «clima de desconfianza». Con todo, en 2014 aumentaron las operaciones de pago al contado.
Otro de los indicadores destacados tiene que ver con los concursos de acreedores, que alcanzaron uno de los mayores picos de la serie, hasta llegar a los 34, un 25% más que el año anterior. Si bien, destacó Sarrión, las empresas no tenían muchos trabajadores y se registraron sobre todo en el comercio al por mayor. Por su parte, la disolución de sociedades mercantiles se mantuvo en la línea de los últimos años. En 2014 se disolvieron 73 y se crearon 267, aunque lejos de las 796 de 2007.
Sarrión también mostró su preocupación por el descenso del número de turistas, al contrario que la tendencia nacional, que redujo el número de viajeros a los 245.115 frente a los 372.712 del año 2007. También decreció el número de pernoctaciones hasta las 421.000, el menor número de los últimos siete años.
En el informe también se analiza el IPC o las matriculaciones de turismos, que están experimentando un pequeño repunte, además de la compra venta de viviendas y la constitución de hipotecas, que no acaban de remontar como en el resto del país, sobre todo la vivienda nueva.