El Plan Hidrológico aumenta en 460 hectómetros las reservas de agua
La Junta ha conseguido negociar y defender los intereses de la región en el reparto del agua. Ha pasado de la guerra del agua a una negociación eficiente
«Cuanto mejor se aproveche el agua, más productiva será la agricultura y, por tanto, mayor será el incremento del nivel de vida de los agricultores de la región y de los castellano-manchegos». Así se ha referido la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, a la hora de defender la apuesta que el Ejecutivo que preside ha conseguido al «pasar de la guerra del agua a una negociación eficiente», que garantiza el abastecimiento de agua a muchas localidades de la Comunidad autónoma.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha conseguido en esta legislatura que, gracias al Acuerdo de Planificación Hidrológica entre las cuencas, nuestra región «va a poder tener agua en cantidad y calidad suficiente para hoy y en todas sus necesidades venideras».
Por este motivo, el Gobierno regional ha luchado, ha negociado y ha defendido desde esta nueva visión los intereses de Castilla-La Mancha en el reparto del agua dentro de la planificación hidrológica, una negociación que se salda consiguiendo el máximo de agua asignada y de reserva que necesita esta región para cubrir sus necesidades hídricas presentes y futuras.
Planificación de cuencas
En este proceso se ha conseguido un 11,30 por ciento más de agua para Castilla-La Mancha en el cómputo global de todas las planificaciones de las cuencas que afectan a la Comunidad autónoma, con un logro histórico de 460 hectómetros cúbicos anuales más de agua de asignaciones y reservas que en el plan anterior.
En el caso del plan del Tajo, se incrementa en 18 por ciento más el agua conseguida para Castilla-La Mancha. Así, se aumenta y se garantiza por ley la reserva mínima de los pantanos al doble, 400 hectómetros cúbicos. Por debajo de esta medida no se puede trasvasar y el agua se queda para la Comunidad.
Y fue precisamente el Gobierno de España el encargado de aprobar el Plan Hidrológico de la cuenca del Tajo, que incluye el trasvase desde esta cuenca a la del Segura de entre 240 hasta 400 hectómetros cúbicos de agua. Además, contemplaba inversiones por más de 6.100 millones de euros, a financiar entre todas las administraciones. Más de la mitad de ellos van destinados al cumplimiento de los objetivos ambientales previstos
Por otro lado, el Ejecutivo regional garantiza 10 metros cúbicos por segundo de caudal ecológico al paso del río Tajo por Talavera de la Reina. En esta planificación también se contempla la prioridad a la obra de la Elevación de las Parras; infraestructura que va a suponer garantizar agua de calidad y cantidad suficiente para nuestros regadíos en esta ciudad.
Igualmente, en la planificación del Segura se ha conseguido como novedad una reserva máxima de 10 hectómetros cúbicos para regadíos sociales en la provincia de Albacete que beneficiará, principalmente, a la zona de Hellín.
En el Plan del Júcar se eleva la reserva asignada a los regantes de La Mancha Oriental a 100 hectómetros cúbicos; se establece que los ciudadanos de Albacete no van a tener que pagar por el uso del agua, algo que legítimamente les corresponde, y se garantiza las obras de la segunda Fase de Sustitución de Bombeos, ya adjudicadas.
Asimismo, la presidenta Cospedal ha recordado que el Plan Hidrológico del Júcar incluye «una apuesta muy importante por los regantes de la provincia de Albacete y la garantía del agua para el abastecimiento humano en la capital, por la que antes teníamos que pagar».
Abastecimiento
Otras de las prioridades del Gobierno de Castilla-La Mancha ha sido el acceso a agua salubre y a servicios de saneamiento para el conjunto de los castellano-manchegos. En este sentido se ha hecho una labor importante en materia de abastecimiento y, sobre todo, en depuración, teniendo en cuenta que no depurar nuestras aguas tiene graves consecuencias en todos los procesos, pudiendo afectar al cierre de fábricas, la disminución de los rendimientos en los cultivos, la aparición de enfermedades y la alteración de los ecosistemas.
Para ello, se hace necesario invertir en nuevas infraestructuras hidráulicas, así como la puesta a punto de las ya existentes. Para este cometido, el Gobierno regional ha gestionado y destinado cerca de 300 millones de euros, montante que procede de fondos propios de la Junta de Comunidades, financiación europea y fondos del Gobierno de España.
Con esta cuantía el Gobierno regional ha garantizado el abastecimiento de agua potable a más de 13.000 ciudadanos, mediante la puesta en funcionamiento de dos Estaciones de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de gran magnitud: la ETAP de Campo de Montiel, y el Sistema del Alberche.
Además, se han invertido otros seis millones de euros en tres programas de abastecimiento para garantizar el agua para consumo humano a 235.000 habitantes que habitan en pequeños municipios.
En materia de depuración se habrán puesto en funcionamiento, a finales de 2015, más de un centenar de estaciones depuradoras de agua, las cuales permitirán devolver el agua limpia de nuevo a nuestros ríos y llegará a beneficiar a unos 114.000 castellano-manchegos.
Además, se ha contribuido a que el pago por la factura de depuración sea menos gravosa para los ayuntamientos y para los ciudadanos. Por ello, desde el 1 de enero de este año, aquellos municipios a los que se les presta el servicio de depuración pueden disfrutar del volumen máximo de facturación, en concepto de depuración, de 250 litros por habitante y día.
Esta medida, de la que ya se pueden beneficiar 132 municipios de toda la región, implica que el canon de depuración sea ajustado, seguro y proporcionado.