El PP renovaría la mayoría absoluta en Castilla-La Mancha
El PSOE pierde 10,9 puntos con respecto a 2011 que se trasvasan a Podemos, que lograría cuatro escaños
Las siglas del PP con María Dolores de Cospedal al frente volverían a gobernar en Castilla-La Mancha de celebrarse hoy elecciones autonómicas y, además, lo harían con una holgada mayoría absoluta. Una encuesta realizada por la consultora Gad3 para ABC estima que su cartel obtendría 18 de los 33 diputados del arco parlamentario, mientras que la lista encabezada por su principal rival, Emiliano García-Page, lograría once parlamentarios y Podemos irrumpiría con cuatro.
Se da la circunstancia de que, según refleja el sondeo, todo el apoyo que previsiblemente acaparará en Castilla-La Mancha al partido liderado por Pablo Iglesias será a costa de voto socialista, lo que indica que la emergencia del populismo estaría teniendo un muy reducido impacto en el PP de Cospedal.
La presencia de Podemos supondrá, en cualquier caso, la ruptura del bipartidismo neto que se ha perpetuado en esta región desde 1999, cuando IU perdió el único diputado que tuvo en la Cámara por dos legislaturas.
Castilla-La Mancha celebra elecciones este mes de mayo con reglas del juego sensiblemente distintas a las que rigieron los anteriores comicios de 2011. En nombre de la austeridad, el Ejecutivo de María Dolores de Cospedal consiguió el año pasado sacar adelante en las Cortes y después en el Congreso una reforma del Estatuto de Autonomía que ha reducido el número de escaños de 49 a 33.
La modificación estuvo respaldada solo por el PP y el PSOE acabó llevándola ante el Tribunal Constitucional, que en diciembre de 2014 avaló los cambios practicados. Con todo, los socialistas no han parado de denunciar que los retoques en la ley se hicieron a la carta para favorecer los intereses de Cospedal y suprimir el pluralismo.
Es imprescindible tener en cuenta este salto de legislación a la hora de valorar que el PP en Castilla-La Mancha logró en 2011 en total 25 escaños y ahora serían 18 y que el PSOE ha contado con 24 escaños que, de acuerdo con los resultados del estudio de Gad3, se quedarían en 11 y darían lugar a la nueva representación de Podemos.
Por eso es obligado hacer la comparativa en relación con los porcentajes de voto, que estima que el Partido Popular pierde 5,8 puntos con respecto a los anteriores comicios al pasar del 48,1% al 42,3%, mientras que el PSOE se deja casi el doble: 10,9 puntos, los que distan entre los 43,4% de 2011 y los 32,5% que le otorga el sondeo. Esa masa que abandona el voto socialista es la que parece prácticamente trasvasada a Podemos, que conseguiría sus cuatro actas gracias a registrar en las urnas el 11,6% de los sufragios.
Contradicciones
La mayoría que la encuesta da al PP coincide también con la valoración de María Dolores de Cospedal por encima de sus oponentes. Aunque ninguno se acerca siquiera al aprobado, con una nota de 3,9, la dirigente popular figura como la más aventajada. Le sigue García-Page con un 3,3 y Daniel Martínez, exnúmero uno de IU en la región, con un 3.
La demoscopia también ha reclamado la puntuación de los ciudadanos a los líderes políticos nacionales, que arroja un ranking novedoso: Pedro Sánchez, con un 4, se pone en cabeza y deja atrás a dos décimas a Cospedal, que cosecha un 3,8. Sorpresivamente, Pablo Iglesias recibe en Castilla-La Mancha tan solo un 2,8.
Estimaciones de voto
Cabe destacar que las proyecciones contenidas en la encuesta son estimaciones de voto, es decir, la suma de quienes responden directamente que van a votar a un determinado partido más los que demuestran afinidad con la misma opción, aunque en realidad han esquivado aclararlo acogiéndose al «no sabe / no contesta». De ahí que el voto directo expresado para PP y PSOE (24,8% y 15,3% respectivamente) termine elevándose al 42,3% y 32,5% que refleja el estudio.
Siendo conscientes de esta «cocina» –como se denomina en el argot de la demoscopia– cobra algún sentido que en una región que parece inclinarse por María Dolores de Cospedal, el 51% de los encuestados dice que la gestión de su Gobierno es «mala» y sólo 19,6 que es «buena». Entre medias, un 25,9% la cree «regular».
En la misma línea, preguntados por la evolución de la situación en Castilla-La Mancha desde las últimas elecciones autonómicas, solo un 30,5% considera que ha mejorado «mucho» (6,2%) o «algo» (24,3%). Los que estiman que ha empeorado suman un 43,6%. También hay un 22,1 que interpreta que todo sigue «igual».
La Consultora Gad3 realizó esta encuesta entre el 7 y el 21 de enero de 2015 mediante 2.002 entrevistas telefónicas asistidas por ordenador. El error muestral es de más/menos 2,2%.